Más de un centenar de conductores han participado este domingo en la jornada festiva principal en honor a San Cristóbal en Peñaranda.
Una fiesta que se iniciaba a primeras horas del día con el tradicional saludo del grupo dulzainero Alborada, quienes a bordo de un vehículo clásico recorrían calles y plazas al ritmo de los sones castellanos, anunciando la llegada de los actos más solemnes en honor al santo.
Ya a la una y media del mediodía, la Ermita del Humilladero acogía la
eucaristía en honor a San Cristóbal, tras la que la imagen, portada a hombros, co
menzaba su procesión por la zona, arropado por cientos de personas y una representación de la Corporación municipal.
Una vez de vuelta al Templo, la imagen presidia la bendición de vehículos que hasta pasadas las tres de la tarde ha sido la gran protagonista de una fiesta en la que coches, motos, autobuses, camiones y maquinaria pesada hicieron paciente cola para recibir el agua bendita entre un gran ambiente festivo, que se trasladaba posteriormente hasta el restaurante Las Cabañas, en el que tenía lugar la comida de hermandad, que prolongaba la animación hasta bien entrada la tarde.