Numerosos peñarandinos y vecinos de la comarca han apoyado este sábado a Cantaracillo en la búsqueda de la reconstrucción del puente, derribado en 2013, y que hasta el momento ninguna administración ha tenido en cuenta dentro de sus inversiones.
Los organizaciones de esta acción colocaban una mesa informativa junto al Templete de la Plaza de España para comenzar en la ciudad una campaña de recogida de firmas en favor de que se tenga en cuenta esta construcción, que desde su desaparición está generando importantes problemas entre agricultores y vecinos de Cantaracillo, quienes se ven obligados a dar un rodeo kilométrico para poder llegar hasta sus lugares de labor en sus campos y su ganado.
Esta es la primera acción fuera de la localidad que han llevado a cabo aunque no será la última ya que en
próximas fechas volverán a visitar la ciudad peñarandina, esta vez durante la celebración del tradicional mercadillo de los jueves, además de desplazar su reivindicación hasta municipios como Santiago
de la Puebla.
HISTORIA
Dicho puente, construido sobre las vías del tren que unen Salamanca y Ávila en 1918, servía como pasó superior para poder cruzar esta zona y realizar el camino de Cantaracillo. En la madrugada del 23 de noviembre de 2013 era derribado, obligando a quienes lo utilizaban habitualmente a dar un rodeo de 17 kilómetros para poder llegar a sus destinos, lo que supone un importante coste económico añadido tanto a agricultores como a ganaderos.
Tal y como destacan los organizadores de esta campaña de recogida de firmas "el Ministerio de Fomento, ADIF, y la Diputación de Salamanca se niegan a reconstruir el puente y quieren que sea el Ayuntamiento de Cantaracillo el que asuma la obra. Hay que recordar que hablamos de una localidad pequeña, con apenas 150 habitantes" y solicitan que se dé una solución de una vez por todas a esta problemática para que los habitantes del municipio "podamos vivir con la misma dignidad y servicios que en una ciudad".