Los agentes llegaron provistos de un ariete por si hubiera que haber derribado la puerta del local
Un nuevo suceso sorprendió a Salamanca en la mediodía del martes. Un grupo de agentes de Policía, principalmente de Extranjería, se personaron en una tienda china de la calle Rector Tovar para realizar un registro, llegando a ir provistos de un ariete para derribar la puerta del local.
La operación permanece abierto, pero todo hace indicar a que en el lugar de los hechos se realiza competencia desleal, ya que la tienda participa como intermediario con los estudiantes de origen chino con precios más bajos en excursiones, conversiones de yuanes a euros, etc.