Servicios imprescindibles para empresas en crisis e insolvencia

Resulta muy incómodo cuando los empresarios saben que sus negocios están en un dilema bastante difícil de solventar, pero no poseen a mano las herramientas, servicios o profesionales que los ayuden a medir el problema y a encontrar una solución viable. Es por esto que muchos toman la radical decisión de liquidar la propiedad y ceder al pago de las deudas, finalizando así su sueño y posible único sustento de los empleados.

Sin embargo, hay muchas formas de salir de esa dura situación con ayuda de algunos servicios empresariales específicos, como lo es el concurso de acreedores, un recurso de última instancia pero suele ser uno de los métodos más seguros y efectivos en la actualidad.

La primera opción: Concursos de acreedores

Un concurso de acreedores es un servicio empresarial que cuenta con un equipo de profesionales que ofrecen asesoramiento legal, financiero y económico a las empresas que se encuentran en situación de insolvencia debido a la falta de liquidez. Esto ocurre mayormente por crisis de ventas o marketing, por lo que los empresarios tienden a pensar que es el final de la empresa y es necesario liquidar las propiedades y bienes.

Sin embargo, un concurso de acreedores voluntario ofrece más que eso, es una oportunidad única en la que un grupo de expertos en el sector busca darle un aire judicial a la empresa para que tengan tiempo de finalizar sus responsabilidades con los acreedores y conseguir alternativas para hacer que la empresa salga a flote nuevamente.

También es necesario realizar un procedimiento que esté conformado por una serie de fases del concurso de acreedores, algunas de ellas son las siguientes:

Actos precedentes: Se trata de la preparación de los documentos para el concurso. Hay que tener un poco de asesoría en esta fase para evitar errores fiscales o contables.

Fase habitual: Aquí las empresas solicitan el concurso, se realizan todos los trámites de admisión y se establecen las masas activas y pasivas. Al final de ésta se realiza un informe concursal.

Fase de convenios: Esta es una etapa definitiva, ya que se determina una negociación entre la empresa y los acreedores, la finalidad de esto es reestructurar la deuda y permitirle a la empresa continuar con sus actividades. Aunque también es posible determinar si se liquidará la empresa.

Calificación: Aquí el juez determinará cuál es la calificación de los administradores, según la el estado de insolvencia de la empresa.

Preconcurso de acreedores para empresas

Otra alternativa para las empresas en crisis es el preconcurso de acreedores, que se trata de un recurso que evita que las empresas paralicen sus actividades por completo y permite refinanciar o negociar deudas con menor presión judicial que en el concurso de acreedores. Es por eso que las empresas en preconcurso tienen mayores oportunidades de salir de la crisis que con otros métodos.

Este recurso también ayuda a proteger al administrador de algunas responsabilidades según las determinaciones en la Ley Concursal, pero hay que conocer muy bien cuáles son las condiciones antes de solicitarlo, para ello se debe prestar atención al artículo 5 bis ley concursal, que consiste en lo siguiente:

Para acceder a este procedimiento es necesario que la empresa realice una comunicación preconcursal ante un juez mercantil.

No interviene un administrador concursal, la empresa será el principal responsable.

Las empresas en preconcurso están protegidas ante solicitudes de concurso necesario.

Es un proceso muy corto. En tan solo 5 meses se puede llegar a un acuerdo de prefinanciación.

Las empresas también tienen el beneficio de no acudir a ejecuciones judiciales de bienes previos o anteriores al preconcurso.

La resolución del preconcurso puede ser pública o privada según la petición del deudor.

Los costes son más bajos comparado con el servicio de concurso de acreedor.

Contratación de interim management

Uno de los servicios más efectivos en cuanto a evitar y superar crisis empresariales es la contratación de un equipo de interim management. Se trata de un método de alquiler de directivos. Este sistema es más barato que contratarlos de forma tradicional. De esta forma, la empresa contará con outsourcing financiero, profesionales muy bien formados y que también cuentan con una gran experiencia en distintos tipos de proyectos de crisis o transición.

Los directivos alquilados poseen varias condiciones, como un plazo de tiempo determinado en su contratación y fases muy específicas. En este sentido, también se pueden disfrutar de muchos beneficios, como los siguientes:

Tienen un largo historial de experiencia en cómo coordinar acciones y dirigir empresas en sectores específicos.

Ofrecen una visión nueva y externa, algo que permite acceder a ideas frescas y evita involucrarse demasiado en los problemas, sino enfocarse en resolverlos.

No se vinculan demasiado emocionalmente, por lo que dirigen en pro a la realidad y la situación actual de la empresa.

Forman y aconsejan a otros trabajadores dentro de la empresa, para asegurar que todo vaya de acuerdo al plan.