En los terribles atentados de los trenes murieron 190 personas, incluidos José García Sánchez, Sara Encinas Soriano, Begoña Martín Baeza, Ambrosio Rogado Escribano y Julia Frutos
Salamanca se suma, un año más, a los actos en recuerdo de las personas que perdieron su vida en el ataque terrorista del 11 de marzo de 2004 en Madrid, y de todas aquellas que han sido víctimas de atentados.
Han pasado 15 años, pero las familias y el resto de la sociedad no olvidan el reguero de muerte y dolor que dejó el mayor atentado terrorista de España. Entre las víctimas mortales estaban los salmantinos José García Sánchez, Sara Encinas Soriano, Begoña Martín Baeza, Ambrosio Rogado Escribano y Julia Frutos.
JOSÉ GARCÍA SÁNCHEZ (46 años, Sanchotello). Cuando murió era el subdirector de la sede que Bankinter tiene en la calle de Goya. Tenía 45 años. Era un hombre muy trabajador, recuerdan sus compañeros. Su pasión, los dos hijos, Laura, que cumplirá el 25 de marzo los 18 y el pequeño Marcos, de 14. A su mujer, Conchi, le resulta explicarles la muerte de su padre. Con motivo del 25 aniversario de su empleo en el banco, José quería viajar a Nueva York. No pudo ser.
SARA ENCINAS SORIANO (26 años, Yecla de Yeltes). Se marchó con 26 años. Vitalista, era una buena estudiante de Derecho en la Universidad Autónoma. Con su novio Óscar había comprado un piso en que no recibirían hasta 2017. Solidaria y siempre preocupada por sus compañeros.
BEGOÑA MARTÍN BAEZA (25 años, Béjar). Llevaba sólo nueve meses casada. Su corazón y su cabeza barruntaban ya la posibilidad de tener un hijo con David Martín, su gran amor. Estaba profundamente enamorada. Y también de Béjar, donde serán esparcidas las cenizas el próximo sábado, en el monte del Castañar. Allí pensaba ir aquel 19 de marzo de hace una década. Tampoco pudo celebrar ese viaje desde la capital de España.
AMBROSIO ROGADO ESCRIBANO (56 años, El Campo de Peñaranda). Ambrosio Rogado Escribano estaba casado, tenía 56 años y dos hijos. Trabajaba en la compañía de seguros RGA, grupo que pertenece a las cajas rurales. Siempre de buen humor. Primero fue a estudiar a Salamanca Maestría Industrial en la especialidad de fresador. Ambrosio estuvo afiliado durante un tiempo a UGT. Cuando acabó sus estudios en Salamanca, se fue a trabajar a Madrid. Se casó con Asunción Galán. Se fue la alegría de casa, recuerdan los suyos.
JULIA FRUTOS ROSIQUE (44 años, Salamanca), aunque de origen madrileño pero residía en Salamanca. Cuidaba a ancianos y su marido también trabajaba allí. Tenían pensado asentarse definitivamente en Salamanca.
Beatriz Sánchez Torrecilla, superviviente
Esta abogada de 39 años es una de las salmantinas que logró salir con vida del atentado. Cada día da gracias por estar viva y estar junto a los suyos. Beatriz Sánchez Torrecilla es Licenciada en Psicología por la Universidad de Salamanca, Máster en Drogodependencias por la Universidad Complutense de Madrid, Experta en Cooperación Internacional y Experta en Mediación Familiar.