“Los trastornos del sueño, por su alta prevalencia, necesitan recursos proporcionados”

"El sueño es parte vital de nuestra vida", y de ahí la importancia de dormir bien y cuidar la calidad del sueño y es, además, "causa y consecuencia de muchos síntomas en los pacientes", tal y como apuntan José Luis Fernández Sánchez y Amparo Rosa Sánchez Serrano, facultativos de la Unidad del Sueño del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca, unidad especializada en el diagnóstico y tratamiento de los trastornos del sueño. Aunque los trastornos respiratorios del sueño son los que más se tratan en esta unidad, "abarcamos toda la patología del sueño", trabajando además de manera coordinada con los especialistas de otras áreas (desde neurólogos, psiquiatras o pediatras en el caso de los niños, por ejemplo) cuando se trata de patologías específicas o para el tratamiento de los trastornos respiratorios del sueño que requieren cirugía (otorrino y maxilofacial).

"Los usuarios son conscientes de que los problemas del sueño afectan a su calidad de vida", siendo el equipo médico de la Unidad del Sueño el encargado de poner nombre a lo que hay detrás de esos problemas o dificultades para dormir bien y conciliar un sueño reparador. La Unidad del Sueño realizó el año pasado más de 2.300 estudios nocturnos (se llevan a cabo 6 días a la semana, contando con los resultados en unas horas o como máximo unos días); a lo que se suma el seguimiento de pacientes diagnosticados, sobre todo de trastornos respiratorios del sueño, que "el año pasado fueron casi 5.000". La Unidad del Sueño de Salamanca también recibe pacientes adultos de Zamora y Ávila y niños de Zamora, Ávila, Ponferrada y de León.

A la pregunta de si damos la suficiente importancia a nuestro sueño, los especialistas responden: "Hace falta un poco de labor de concienciación social", tanto de los usuarios como de los profesionales y autoridades sanitarias, subrayando además que "la alta prevalencia de estos procesos necesita unos recursos proporcionados, y cuando no lo son muchas veces generan disfunciones, listas de espera".

Los trastornos del sueño, tal y como afirma el doctor José Luis Fernández, "no son problemas de segundo orden, no se trata simplemente de pacientes que duermen mal o que roncan mientras duermen". De hecho, explica, "la patología más frecuente de los pacientes en Atención Primaria, sobre todo los mayores, son los trastornos de insomnio y de mala calidad del sueño, y luego la patología respiratoria más frecuente son los tratornos respiratorios del sueño, muy por encima de otras enfermedades como el asma o la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC)".

¿Cuándo no dormir bien se convierte en un problema? "Si hablamos de calidad del sueño nos tiene que preocupar cuando tiene repercusiones en nuestra vida durante el día, cuando los síntomas nocturnos afectan al rendimiento diurno (laboral, social..), al comportamiento, al carácter, a la capacidad para afrontar los problemas, ahí nos tiene que empezar a preocupar", señala el doctor Fernández. Trastornos del sueño que, "hasta la edad menopáusica", como apunta la doctora Sánchez Serrano, "son más frecuente en hombres, pero después nos igualamos".

Síndrome de apnea del sueño

El síndrome de apnea del sueño "afecta a entre el 15-20% de la población adulta", siendo además la patología que con más frecuencia se diagnostica y trata en la Unidad del Sueño de Salamanca. "Consiste en paradas respiratorias durante la noche, que se producen cuando el paciente se duerme y los músculos de la garganta pierden su tono y se cierran", añadiendo que "la apnea del sueño no tiene cura salvo que sea secundaria a causas determinadas". Es decir, "hay algunos casos que se asocia a grandes obesidades, trastornos endocrinológicos, trastornos hormonales, deformidades faciales, por lo que solucionando el problema (tratamiento hormonal o cirugía a nivel maxilofacial, por ejemplo), se resuelve, pero en la gran mayoría no, porque es también una cuestión del funcionamiento de esa musculatura". La terapia con CPAP (máquinas de presión continua positiva en las vías respiratorias) es el tratamiento más común para los pacientes diagnosticados con apnea del sueño.

Tanto para evitar las consecuencias para la salud que puede llevar aparejado como para "mejorar la calidad de vida del paciente", el síndrome de apnea del sueño debe ser diagnosticado y tratado, siendo además "rentable desde el punto de vista sanitario al disminuir la morbilidad cardiovascular y otros efectos secundarios, como riesgo de ictus cerebrales, de arritmias, insuficiencia cardiaca...".

Los niños y el sueño

"Los niños también tienen trastornos del sueño", aunque "con otras características distintas a los adultos", tal y como explica el equipo médico de la Unidad del Sueño, a la que acuden sobre todo "dos grandes grupos, los niños con problemas respiratorios, con síndrome de apnea del sueño, y otro grupo de niños con problemas neurológicos sobre todo derivados de enfermedades congénitas o genéticas, niños que necesitan estudios complejos para apoyar el diagnóstico de los pediatras".

Investigación del sueño

"Ha avanzado, pero menos de lo que debiera. Hoy quizá los diagnósticos son más accesibles, pero los tratamientos y diagnósticos básicos son similares a hace veinte años. Sabemos más, hacemos más cosas, relacionamos con más procesos, pero el tratamiento básico es el mismo". No obstante, como añade el doctor Fernández, "en lo que sí se ha avanzado es en el conocimiento de la implicación de los trastornos del sueño con otras enfermedades (cardiacas, cerrebrales, endocrinológicas e incluso tumorales)".

Uso de dispositivos electrónicos antes de dormir

"Dormimos menos horas de las que sería recomendable dormir". Así lo aseguran los especialistas de la Unidad del Sueño del Complejo Asistencial de Salamanca. Y en ello influye, como añade el doctor José Luis Fernández, que "en España somos un país donde tenemos unos horarios laborales y de ocio que están un poco enfrentados con el sueño". En cambio, "algo que se nos critica como país, como es la siesta, no es mala", todo lo contrario, "una siesta limitada, no pasar de media hora" tiene efectos positivos, y de hecho "hay estudios en revistas de prestigio que describen que es uno de los factores protectores cardiovasculares". Eso sí, precisa, "si tienes una siesta excesiva denota que hay un problema, problablemente en el sueño nocturno".

¿Cómo cuidar el sueño? De entrada, "con unos horarios más regulares de sueño, pensar que tenemos que dormir más". Para saber cuántas horas necesitamos dormir, "tienes que plantearte cuántas horas duermes cuando llevas unos días de vacaciones, echa la cuenta, y esas son las horas que necesitas dormir".

Y de la mano de los nuevos dispositivos tecnológicos (móviles, tablets, ordenadores...) ha surgido otro problema cada nueva y cada vez más común, "sobre todo en pacientes más jóvenes", como "es la estimulación sobre todo visual y de atención. El hecho de utilizar antes de dormir estos aparatos con pantallas, lo que hace es inducir a la vigilia y que la conciliación del sueño sea un problema muy serio". No solo hay que alejar los móviles y ordenadores para conciliar mejor el sueño, "tener la televisión en la habitación es un error, para los adultos y para los niños".

Tal y como señalan los expertos en trastornos del sueño, "necesitamos dejar al organismo que siga el ritmo biológico. Vivimos en relación con el ciclo vida noche y lo alteramos por nuestra vida social o laboral".

Día Mundial del Sueño

Este mes de marzo se celebra el Día Mundial del Sueño (15 de marzo), una jornada para concienciar sobre la importancia que tiene para nuestra salud dedicar tiempo suficiente al sueño y a adecuar los horarios que dedicamos a dormir.