Los ataques del lobo a la cabaña ganadera se reducen un 41% en Salamanca

Aunque los ataques del lobo a la cabaña ganadera de Castilla y León aumentaron entre enero y septiembre del pasado año un 38,6% con 1.916 y 2.709 cabezas muertas, en el caso de Salamanca se produjo un descenso del 41% en relación con el año anterior. Los ganaderos salmantinos, principalmente de ovino, perdieron 129 cabezas en los 42 ataques producidos, lejos de los 87 ataques y 282 animales muertos -255 de ovino y 27 bovinos- producidos en el mismo periodo de 2017, según los datos de la Consejería de Medio Ambiente.

Son dos provincias situadas al sur del Duero las que acaparan el 73% de los ataques de cánidos y dos de cada tres muertes, como recoge UPA. Ávila fue la más perjudicada, con 990 ataques y 1.158 cabezas muertas; Segovia, con 409 ataques y 630 animales muertos y Zamora, con 170 y 384 cabezas muertas.

Con estas cifras, la organización agraria UPA considera un "despropósito" que el Tribunal Supremo anule definitivamente el Plan de Gestión del Lobo, insistiendo en la necesidad de controlar una especie que se ha expandido "extraordinariamente por todo el territorio regiona, en los últimos años, provocando daños millonarios a los ganaderos, tanto al norte como al sur del Duero".