Reencuentros y emociones han sido los grandes protagonistas de una más que esperada reunión que los quintos y quintas nacidos en 1953 celebraban este sábado en Peñaranda.
Una intensa jornada festiva que se iniciaba con los saludos, abrazos y recuerdos del encuentro, para dar paso a la solemnidad de una eucaristía celebraba en la iglesia parroquial San Miguel Arcángel y oficiada por Lauren Sevillano.
Tr
as ella la celebración se trasladaba a las calles en las que, al ritmo de los sones de los dulzaineros Alborada, comenzaban los bailes, corrillos y la ya tradicional foto de familia en el Templete de la Plaza de España.
La visita al colegio de La Encarnación, centro en el que cursaron buena parte de los quintos, servía de perfecta previa a la comida de hermandad y la posterior fiesta que se prolongaba hasta bien entrada la tarde.