Sábado, 21 de diciembre de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
Un año después
X

Un año después

Actualizado 04/10/2018

Ese trozo de España que se llama Cataluña, que dicen que es un país, pequeño, muy pequeño, casi nada, o menos que nada, está hundido y arruinado. Esta dominado por el llamado Comité de Defensa de la Revolución (CDR) nada de "Republica", compuesto por chavales jóvenes mochileros vestidos con bermudas y camisetas pintadas, algunos hasta se esconden con mascaras, están apoyados por los cabecillas de la insurrección, los prófugos de la justicia los que están entre rejas y el actual jefe en funciones de la Generalidad, Chis-Torra, que pertenece a ese grupo revolucionario. Y como se creen que han inventado la revolución, no saben qué hacer con ella. Porque en cualquier momento les puede aplastar.

Este Chis-Torra se ha puesto al frente de la celebración del primer aniversario del simulacro de referéndum de hace un año. Y el muy paleto empezó en un pueblo de Gerona, (Santa Julia de Ramis) los vecinos le recibieron con barretinas que es un cubrecabezas muy rustico del siglo dieciocho más o menos, de color rojo, como la sangre, menos mal que no le han cambiado al amarillo como los trapos que tiene engalanada Barcelona. Después de su pregón pueblerino se traslado a la capital para ponerse debajo de la pancarta que mejor resume el lema de la manifestación que ha recorrido Barcelona. "La autodeterminación es un derecho humano". ¡Casi nada! A partir de aquí huelga decir que cualquier cosa es posible. Tan posible que hasta que no tengan muertos en cima de la mesa no se darán cuenta que una revolución no se hace con mentiras y engaños, a no ser que sea una dictadura fascista.

Lo que está pasando es que los políticos de la revuelta saben que todo es un fraude, que han engañado al pueblo y han fracasado, se han inventado un proceso y ahora no saben qué hacer con él, ósea, una "revolución frustrada". Por eso se volverá contra ellos, los de CDR que ya les llaman traidores. ¿Y que le queda a Chis-Torra? solo le queda aumentar las exigencias de todo tipo al Dr. Sánchez, al que le quedan pocas razones para presumir de dialogo, y si de amenazas y ultimátum. Le exigen concesiones del Estado, con los políticos presos y con la pasta de todos los españoles. Y si no le darán donde más le duele, le echarán de la cama del Palacio de La Moncloa. Los secesionistas se agarran al trapo amarillo, que ya lo llevaban los piratas en sus barcos. Y yo le digo al Dr. Sánchez, el que elija entre la humillación y la guerra. No elijas la humillación porque te llevara a la guerra? Máximo de la Peña Bermejo

Comentarios...