Viernes, 19 de abril de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
“Ser empresario no es fácil pero sí muy satisfactorio. Nunca hay que tener miedo a invertir”
X
Álvaro Juanes / Empresario

“Ser empresario no es fácil pero sí muy satisfactorio. Nunca hay que tener miedo a invertir”

Actualizado 07/09/2018
Redacción

Juanes es promotor y constructor inmobiliario, gestiona su propia inmobiliaria, tiene una distribuidora de alimentos y bebidas y además es socio- propietario de dos establecimientos hoteleros en la ciudad

Tener ideas es fácil, implementarlas es lo difícil. Esta afirmación la conoce de primera mano Álvaro Juanes, emprendedor, empresario, innovador. Ha crecido palpando y sintiendo el mundo de los negocios, una herencia familiar que define como un "veneno muy positivo". "Una vez que entras en el mundo de la empresa, ya es muy difícil salir. Sabes que tienes ahí unos negocios y sabes que hay que hacerlos funcionar", explica.

¿Cómo fueron sus comienzos en el mundo laboral?

Empecé a trabajar con 14 años, siempre me gustó tener mi microeconomía. He sido de todo: desde camarero, relaciones públicas, recepcionista, director de hotel, director de sala?. un poco de todo, y creo que eso ha sido fundamental. Mi primera empresa la tuve con 17 años por ese veneno que vas mamando desde pequeño. La sensación de poner en marcha un proyecto y ver que te sale da más satisfacción que todo el dinero que luego se pueda ganar, eso ya es otra cuestión.

Una faceta como empresario completa y en sectores muy diversos?

La verdad es que sí. Actualmente soy promotor y constructor inmobiliario, tengo mi propia inmobiliaria 'Loé', tengo una distribuidora de alimentos y bebidas y además soy socio propietario de dos establecimientos hoteleros. Por un lado 'Hall 88' y por otro lado la empresa 'JCH Congresos Apartamentos', que se trata de un edificio de apartamentos en régimen de alquiler en el pleno casco histórico, unas instalaciones que cuentan con todas las prestaciones necesarias para garantizar el máximo descanso.

Hall 88 es un referente en la ciudad?

Yo creo que sí. Hall 88 nace de la promoción inmobiliaria, y pertenece al Grupo Empresarial Juanes que actualmente gestiono junto a mis dos hermanos. El origen de este grupo empresarial se remonta a los años 60 de la mano de Victoriano Juanes, nuestro padre, un empresario muy brillante, muy aventurado y que con poco más de 20 años tenía su primera obra abierta.

Estando mi padre a la cabeza, este grupo empresarial tiene en Salamanca entre 25 y 30 edificios, y muchos proyectos llevados a cabo en otras ciudades como Zamora, Marbella o Valladolid. Nosotros consideramos que un buen empresario siempre tiene que estar a la caza de nuevos negocios y cuando decidimos apostar por el sector turístico con Hall 88 creemos que acertamos. No hemos parado de crecer y de innovar. Recientemente hemos remodelado todas las instalaciones con una inversión fuerte con el objetivo de comercializar todos los productos de Hall 88 con una imagen renovada y abarcando todos los productos que la restauración puede ofrecer: desde desayunos a la carta, buffet, lunch a mediodía, comidas, meriendas, cenas, carta elaborada, carta de cafetería, menú para bodas, bautizos y comuniones, cócteles, copas de primera hora? abarcar todo lo que hemos hecho este tiempo pero con una imagen renovada. Hay momentos que tienes que ser más conservador y otras veces hay que apostar.

La aportación económica a la ciudad de este grupo empresarial es fuerte?

Lo es. Sin ahondar en puestos fijos, yo siempre digo que detrás de un puesto de trabajo hay una familia y son muchas las familias que ya viven de este grupo empresarial. A esto hay que sumar la promoción turística que estamos haciendo. Los hoteleros estamos trayendo gente a Salamanca, el estar creando empresas siempre supone movimiento de la economía.

¿Qué es lo más difícil de ser empresario?

Lo más difícil es que eres empresario siempre, los domingos, los puentes y estés donde estés. Desde fuera se ve como algo muy romántico pero siempre hay preocupaciones, y el trabajo del empresario al 90% es el de resolver problemas, aunque es verdad que con el tiempo aprendes a saber llevarlos y los problemas del día a día no me afectan igual ahora que hace 20 años. Con la crisis económica ha habido momentos duros, para nosotros y para todos los españoles, pero aquí seguimos con ganas de crecer.

¿Cómo has evolucionado profesionalmente?

El Álvaro de hoy es un empresario con mucha más experiencia, mucho más tranquilo, mucho más cabal, más analítico? que estudia los temas de una manera más racional, quizá con menos ambición de juventud pero con una ilusión mucho más real. Me siento preparado para cualquier tipo de negocio. Mi teoría es que al final da igual lo que vendas. Todos los negocios al 80% son iguales, me veo preparado para comercializar un ladrillo, un zapato o una hamburguesa, por ejemplificar.

¿Se plantea apostar por una nueva línea de negocio?

Sí, por diferentes circunstancias estuve durante 6 años en el sector de la medicina estética, tuve que vender la empresa por motivos personales pero funcionaba y funciona muy bien. Es un sector que me gusta, fui pionero en la ciudad creando mi propia marca y creo que es un sector que puede funcionar, por lo que tengo ilusión por seguir trabajando en ello con nuevos proyectos tanto en Salamanca como a nivel nacional.

El hecho de trabajar codo con codo con sus hermanos, ¿hace el día a día más fácil?

Rotundamente sí. Pertenecer a un grupo de empresas formado por hermanos hace que todo sean ventajas, porque el nivel de confianza es altísimo. Sabemos que somos muy transparentes y tenemos la tranquilidad total. Tenemos una sinergia muy potente porque hemos sabido direccionar a cada uno las labores que mejor se les dan. Hay ciertas cosas que las tenemos muy definidas, pero sí que hay mucha sinergia y nos apoyamos en todo.

Un mensaje para los emprendedores?

Mi mensaje a todos los empresarios siempre es de ánimo. Animo a que inviertan con cautela pero sin miedo, con riesgo pero medido y controlado, porque está claro que hay alegría y que hay muchas posibilidades de recuperarnos al 100% de la crisis apostando por el trabajo óptimo.

Comentarios...