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Izquierda Unida muestra su preocupación por la situación de la residencia San Juan de Sahagún
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GERIÁTRICO

Izquierda Unida muestra su preocupación por la situación de la residencia San Juan de Sahagún

Actualizado 07/09/2018
Redacción

La coalición denuncia que la situación de la residencia responde a "una desidia tremenda por parte de la administración pública de Castilla y León

El grupo político Izquierda Unida hacía pública una carta en la que informaba de su preocupación por la situación actual de la residencia geriátrica San Juan de Sahagún, de titularidad pública. A continuación reproducimos íntegramente la nota elaborada por la formación y trasladada a los medios de comunicación

Izquierda Unida ha tenido conocimiento de la nefasta situación de la residencia geriátrica "San Juan de Sahagún", de titularidad pública, en Salamanca. En reuniones y consultas hechas a varias personas integrantes de su plantilla, el coordinador local de IU en Salamanca ha tenido conocimiento de que la citada residencia, de 138 plazas, presenta una ocupación actual de apenas 51 residentes, cuando tenemos a la Junta de Castilla y León subvencionando plazas en residencia geriátricas de titularidad privada, algunas de ellas de dudosa calidad asistencial.

La coalición de Izquierdas denuncia que la situación de la residencia responde a "una desidia tremenda por parte de la administración pública de Castilla y León, concretamente de sus responsables, dado el estado en el que se encuentra la misma desde 20El07. En palabras de Francisco Javier Herrero Polo, el coordinador de IU Salamanca Ciudad, "Esta residencia ha recibido multitud de visitas políticas para hacerse la foto desde 2007, encontrándonos con proyectos y maquetas para una nueva residencia geriátrica en Salamanca desde dicho año."

Para la coalición es imperdonable e inexplicable que desde 2007, coincidiendo con la proximidad de las elecciones municipales y autonómicas, se hayan venido presentando proyectos de diverso tipo, con grandes maquetas, lo que supone un coste para las arcas públicas, y ninguno de dichos proyectos se haya materializado hasta la fecha.

Izquierda Unida señala que desde 2007, las plazas de residentes que quedaban vacantes en la actual residencia no se cubrían, lo que nos ha llevado a la actual situación de sobreutilización de la actual residencia, inexistencia de la nueva residencia pública que subsane los defectos de la presente, y retraso durante 11 años de la construcción de una nueva. La nueva residencia, según los datos a los que ha tenido acceso Izquierda Unida, contaría con apenas 90 plazas, en caso de construirse y supondría la amortización de 48 plazas de residencia geriátrica de titularidad pública en nuestra provincia, desde 2007 hasta la actualidad.

Según la información de la que dispone Izquierda Unida, en estos últimos años, en paralelo a la amortización de plazas, se ha ido produciendo una amortización de puestos de trabajo en el apartado del personal de servicios. Miembros de la plantilla señalan que desde 2014 se han eliminado 7 plazas de este personal. Herrero Polo señala que "la última persona se trasladó en diciembre de 2017 de esta residencia a otra de la Comunidad, apareciendo anulada la plaza en la planilla de personal de servicios desde marzo del presente año."

Para Izquierda Unida es intolerable que se recurra, sistemáticamente, como parece ser el caso, a la figura de las necesidades del servicio para repartir las tareas del personal que se viene amortizando desde la dirección del centro y de la Gerencia Territorial de Servicios Sociales.

Por todo ello, Izquierda Unida de Salamanca, presentará una batería de preguntas, a través de José Sarrión Andaluz, Procurador de IUCyL, dirigidas a clarificar la actual situación de la residencia pública de la Junta de Castilla y León, y los detalles sobre la nueva, prometida una vez más por el Gobierno del Partido Popular de Castilla y León.

El Coordinador Local de IU recuerda que "no es lícito que, existiendo proyectos públicos, con plazas de geriatría públicas, se amorticen las mimas, depauperando las condiciones de los ancianos y ancianas en las residencias, al mismo tiempo que se eliminan puestos de trabajo públicos, de calidad y buena remuneración, para derivar dinero público a residencias geriátricas privadas, como las de Bellavista, que presentan denuncias constantes por parte de trabajadoras y familiares de residentes."

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