La organización ha recomendado "sentido común" ante la situación que se repite cada año en todas las campañas cerealistas
La Alianza UPA-COAG ha rechazado rotundamente las acusaciones vertidas días atrás por la Asociación de Fabricantes de Piensos Compuestos de Castilla y León (ASFACYL) en las que achaca a los agricultores de retener el grano para hacer subir los precios.
La organización ha recordado que "los agricultores no tienen tanta capacidad de almacenaje como para influir de manera determinante en los precios del cereal, y que siempre son ellos los paganos de las maniobras especulativas de almacenistas e industriales para manejar interesadamente a su antojo los datos sobre volúmenes de producción, hundir los precios de los mercados y comprar barato a los productores".
La Alianza UPA-COAG se ha visto obligada a recomendar "sentido común" ante la situación que viene repitiéndose año tras año en todas las campañas cerealistas por estas fechas, donde "aparecen cifras, datos de producción y declaraciones intencionadas que pretenden provocar grandes tensiones en el mercado de cereales". En estas circunstancias, con previsiones que apuntan a un alza en el precio del cereal debido a la coyuntura del mercado internacional, "es más importante que nunca informarse bien y no precipitarse a la hora de vender el cereal", afirmó la organización.
Por todo ello, UPA-COAG ha recomendado a los agricultores "que no vendan precipitadamente y que acudan a las cooperativas". De igual modo recordaron a los productores "que es muy importante que escalonen las ventas con el fin de no saturar el mercado, para evitar de este modo la especulación habitual ejercida por personajes cuyo único fin es enriquecerse a costa de los propios productores".
La Alianza ha calificado como "lamentable" la denuncia de la Asociación de Fabricantes de Piensos responsabilizando a los agricultores de Castilla y León de las subidas que acometerán en los precios de los piensos como consecuencia de la "retención del cereal".
"Es un abuso intolerable el aprovechamiento que las industrias de piensos tratan de ejercer año tras año, presionando económicamente a los agricultores y a los ganaderos. Es más vergonzosa la situación si tenemos en cuenta que esas empresas utilizan prácticas como sacar al mercado los piensos elaborados con materia prima pagada en su día a precios muy bajos", concluyó la organización.