El Humilladero de Rágama luce desde esta semana una renovada imagen tras la finalización del proyecto que desde hace semanas se viene desarrollando en este importante monumento, al que desde el consistorio se ha pretendido poner en valor buscando desde tiempo atrás las fórmulas que permitieran llevar a cabo las obras que ahora culminan con su certificación, llevada a cabo estos días.
Unos trabajos, muy buscados desde hace años, que han supuesto una inversión de 30.999 euros, de los que 20.000 han sido aportados de manera subvencionada a través del Programa Leadercal gestionado por la asociación Nordeste.
LA OBRA
Esta revalorización del Humilladero de Rágama cuenta con una
amplia batería de trabajos alrededor del monumento que han contado con la f
ormación de un camino terroso paralelo a la carretera, marcado con bordillos y flanqueado por cipreses que van indicando una línea visual de ida y vuelta que enmarca la vista del monumento y la iglesia respectivamente.
Junto al lugar hay de nuevo un banco de bordillos con una alfombra de losas de granito viejo, mientras que el terreno restante se ha cubierto por una plantación de tomillo y se han colocado unas luminarias solares marcando el recorrido.
También se han incorporado dos antiguas basas de un viejo viacrucis que se encontraba en la localidad y que ahora van marcando los quiebros del camino, a lo que se añade la colocación de una placa de acero inoxidable con el nombre y la serigrafía del Humilladero, completándose así las diferentes fases de esta nueva imagen que esperan sea uno de los atractivos turísticos de Rágama de aquí en adelante.