La primera producción no se da hasta los cinco años, alcanzando el máximo rendimiento en torno a los diez
La producción de pistacho sigue al alza, duplicando casi la superficie en el último año con unas 16.000 hectáreas, destacando principalmente las comunidades de Castilla-La Mancha, Castilla y León y Extremadura. La rentabilidad de este cultivo es uno de los alicientes para los productores, aunque el fruto de la inversión llega a largo plazo.
Los primeros resultados no se dan hasta los cuatro-cinco años, con siete el objetivo es que produzcan medio kilo por árbol, alcanzando el máximo rendimiento del pistachero en torno a los 10 años ?con seis o siete kilos-, y una vida productiva que puede alcanzar los 50 años. El kilo de pistacho se paga entre cinco y ocho euros, dependiendo del calibre y del estado. José María Rey, presidente de la Asociación de Productores de Pistacho de Castilla y León, Aspropicyl, asegura que se trata de un cultivo por el que se sigue apostando por su alta rentabilidad. Sin embargo, apela a la prudencia y a la cautela a la hora de producir "porque todo no vale, ni se puede plantar en cualquier sitio", pero reconoce que sí se está plantando en la Comunidad.
"Queremos que nos proporcionen ayuda técnica"
Con unos 180 productores y 700 hectáreas en la Comunidad, el presidente de la asociación, productor de la localidad vallisoletana de Villafuerte de Esgueva, destaca dos problemas a los que se enfrentan los productores que apuestan por el pistacho. Por un lado, el escaso conocimiento que se tiene del cultivo y, por otro, la escasez de técnicos especializados que orienten a los productores. "No queremos ayudas de la Administración, pero sí que nos proporcionen apoyo técnico". Otro problema al que se enfrentan es a la escasez de planta en los viveros ?hay más demanda que oferta- y el alto precio de la planta, entre 10 y 14 euros. Una elevada inversión que se ve compensada con la producción y el alto precio del pistacho en el mercado, "siempre que el cultivo se realice con un buen manejo", remarca José María Rey.
Porque, explica este productor, el pistachero requiere unas labores concretas y un buen manejo, claves para una buena producción. Buen ejemplo es el productor zamorano Félix Talegón, pionero en el cultivo de pistacho en Castilla y León, con su plantación en Toro, "y una producción de 1.500 kilos por hectárea", destaca José María Rey, que considera que se trata de un reto para muchos pueblos y zonas de Castilla y León que con pocas plantas de este cultivo "daría una rentabilidad estupenda" porque una familia con cinco-siete hectáreas "puede vivir perfectamente".
Los cuidados que requiere son similares a otro árbol, asegura el presidente de Aspropicyl, pero hay que conocer perfectamente qué labores específicas hay que hacer a la hora de plantar y el manejo de una buena poda es fundamental. De esta manera, "se puede adelantar la entrada en producción un año o dos".
Madroñal, el único proyecto de cuatro que sigue adelante
Hay que tener paciencia para ver los primeros resultados. Bien lo sabe José Guinaldo, de Madroñal de la Sierra, que comenzó con los pistachos en el marco del experimento piloto de Asaja, financiado por la Diputación, puesto en marcha hace cuatro años en La Sierra y Las Arribes. "Y por lo menos, hasta dentro de otros cuatro años, no creo que vea producción", asegura.
José Guinaldo tiene 100 árboles en unos 3.000 metros y es la única, de las cuatro que se iniciaron en 2014, que se mantiene. La plantación de pistachos de Guinaldo se incluyó en el programa piloto con plantones especiales -porta-injertos-, en marcha en Madroñal y en Hinojosa de Duero en una superficie de 6.000 metros cuadrados. Cuatro años después, es la única que sigue adelante. Clima y características del terreno son determinantes para un cultivo que requiere, sobre todo, de mucha paciencia.
José Antonio Corrionero: "Un cultivo rentable, a precios de hoy"
Apenas un año lleva con sus pistacheros José Antonio Corrionero Lucas, de Pedrosillo de Alba, en 1,5 hectáreas. Reconoce que se animó porque le gustan y tiene árboles frutales y considera que el pistacho es un producto "que tiene futuro", aunque reconoce que hay que dedicarle tiempo. Sobre la rentabilidad, matiza que se trata de un cultivo rentable "a día de hoy", pero aumentando la superficie plantada tanto en Castilla y León como en el resto de España "no sabemos qué precio tendrá dentro de 10 años".
Fotos: Asaja Salamanca