El viento ha obligado a acordonar un histórico inmueble en de la calle Nuestra Señora tras la caída de parte de una de sus debilitadas cornisas debido a las fuertes rachas que durante todo este sábado se han registrado en la ciudad.
Un suceso que se producía en torno a la una de la tarde cuando se alertaba del desprendimiento de parte de una de las cornisas de esta antigua vivienda, cuya histórica fachada comienza a presentar problemas debido al paso del tiempo y la falta de mantenimiento.
Agentes de la Policía Local procedían de inmediato a acordonar el perímetro del edificio, colocando vallas metálicas y un precinto de seguridad
para evitar mayores problemas y el tránsito de peatones en sus inmediaciones.
Esta es la segunda zona acordonada en la misma calle y por circunstancias similares ya que, unos números más abajo, era acordonada otra vivienda deshabitada el pasado mes de febrero debido a la caída de cascotes, lo que sumado al incidente de hoy y la caída de cascotes en otro inmueble cerrado de esta misma calle hace escasas semanas, ha generado gran malestar vecinal y un intenso debate en la zona ante la delicada situación que se vive en esta céntrica y transitada vía peñarandina y las medidas a adoptar entre dueños y la administración para evitar situaciones como las vividas ultimamente.