El Gobierno subirá el SMI un 4% en 2018 y apunta a un alza del 10% en vísperas de las elecciones ...

El Ejecutivo quiere dar un fuerte impulso al salario mínimo interprofesional (SMI) y para ello va a plantear a los agentes sociales y al PSOE «un gran acuerdo a tres años» con el objetivo de alcanzar los 12.000 euros anuales para 2020, como adelantó este periódico. Rajoy avanzó este lunes que el alza para 2018 será del 4%. Y, pese a que no desveló los porcentajes para los dos próximos años, fuentes conocedoras de la negociación confirmaron a este medio que la intención del Ejecutivo es que en 2019 suba entre un 5% y un 6% para dejar para 2020, el último año de la legislatura y con las elecciones en el horizonte, el mayor incremento desde 1983: en torno a un 10%.

«Hemos calculado una subida del 4% para 2018, con lo cual llegaríamos a unos 10.400 euros al año», explicó el presidente del Gobierno en una entrevista al diario 20 minutos. Elevar el SMI un 4% supone 28,3 euros más al mes hasta situarlo en los 735,9 euros brutos repartidos en 14 pagas. Sin embargo, Rajoy habló también de llegar a «unos 10.400 euros al año» y, si esto fuera así, la subida no sería del 4% sino del 5% (4,98%, concretamente), puesto que en 2017 el salario mínimo se traduce en 9.906,4 euros anuales, por lo que en este caso ascendería a 35,25 euros al mes hasta los 742,85 euros.

Fuentes del Ministerio de Empleo confirmaron a este periódico que la subida para 2018 será del 4%, algo que el Gobierno aprobará por Real Decreto en el último Consejo de Ministros del año, que se celebrará el próximo día 29. Y así se lo transmitirá este martes la ministra Fátima Báñez a los líderes de los dos principales sindicatos y la patronal en la reunión que mantendrán por la tarde. El Ministerio niega, sin embargo, que los incrementos de los dos próximos años estén ya pactados.

De cualquier modo, Rajoy sí anunció que propondrán también «subidas importantes para 2019 y 2020», aunque, eso sí, advirtió que siempre y cuando fueran «compatibles con seguir creciendo y creando al menos 450.000 puestos de trabajo». Tal y como adelantó este periódico la semana pasada, el Gobierno ha puesto encima de la mesa de los agentes sociales un pacto para llegar a un salario mínimo de 1.000 euros al mes en 2020 (pero repartidos en 12 pagas, con lo que serían 12.000 euros al año), lo que implicaría un alza del 21% para repartir de forma gradual en los próximos tres años.

En realidad, este incremento del 4% para 2018 supone la mitad del que el PP aprobó para este año, cuando lo fijó en un 8% -el mayor alza de una sola vez de los últimos 30 años-, obligado por el PSOE, que lo puso como contrapartida para lograr la abstención que permitiera al Gobierno aprobar el techo de gasto y los objetivos de déficit para 2017. En 2016 el SMI apenas subió un 1%, en la línea con las subidas aprobadas por el Gobierno de Mariano Rajoy (entre un 1 y un 1,5%), pues hasta entonces la tónica habitual era que la revalorización del SMI fuera en consonancia con la inflación.

Sin embargo, el presidente del Gobierno quiere que estas fuertes subidas de las remuneraciones más bajas sirvan para enviar «un mensaje» a empresarios y sindicatos, de cara a fijar los salarios para 2018 en la negociación colectiva, tras no lograr un acuerdo para este curso, puesto que Rajoy admitió que «nos gustaría que los sueldos sean más elevados».

Objetivo: 1.000 euros

El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, mostró este lunes su disposición a negociar con el Gobierno un acuerdo respecto al SMI de cara a 2020, algo que considera «clave» de cara a la negociación colectiva. «Los salarios más bajos tienen que subir una cantidad lineal muy importante», sostuvo, al tiempo que adelantó que exigirán que «aquellos que estén por debajo de los 1.000 euros por convenio tienen que superar esa barrera». Así, Álvarez anunció también que, de cara al incremento salarial de 2018, no van a plantear un porcentaje general para todas las remuneraciones, tal y como hicieron este año, que pidieron un incremento entre el 1,8% y el 3%. La patronal accedió a una horquilla entre el 1,2% y el 2% más medio punto adicional dependiendo de la productividad, un variable que ahora están valorando mejorar hasta el punto completo, aunque esta mejora divide a la CEOE.

Por su parte, el líder de CC OO, Unai Sordo, reivindicó que España tiene que situar su salario mínimo en el 60% de la media salarial, tal y como recomienda la Carta Social europea, y considera que el 4% ofrecido por el Gobierno «ni de lejos cubre esta expectativa». Por tanto, defiende que hay que concretar una negociación para ver en qué plazos este país cumple con este objetivo.

Por el contrario, el presidente del Instituto de Estudios Económicos (IEE), José Luis Feito, advirtió que un fuerte incremento del SMI podría aumentar el empleo temporal y parcial en tiempos de bonanza y destruir empleo en momentos de crisis.

Fuente: El Norte de Castilla