Casas colgantes, con jardines colgantes. Y el cielo como culmen. Todo aquí es celebración de la luz, que se expande en un himno para todos. El color es la luz -indicaba de modo certero el pintor Esteban Vicente-. Sí, aquí el color celebra, en el silenci
Casas colgantes, con jardines colgantes. Y el cielo como culmen. Todo aquí es celebración de la luz, que se expande en un himno para todos. El color es la luz -indicaba de modo certero el pintor Esteban Vicente-. Sí, aquí el color celebra, en el silencio de su estar. Y todo lo corona el azul luminoso de los cielos. Porque, en esta imagen, todo está en esa perspectiva ascendente, que conduce a la plenitud, por si la merecemos.
José Luis Puerto (Texto) / Ángeles Rebollo (Fotografía)(La provincia del alma).- Flores en las balconadas de la plaza de La Alberca