Multitudinario seguimiento a la solemne y calurosísima cita con el Santísimo

Las altas temperaturas están siendo las protagonistas indiscutibles de las primeras horas del bloque principal de las fiestas del Corpus de La Fuente de San Esteban, que arrancó en la noche del miércoles. En ese momento, se puedo disfrutar de una forma muy agradable, por ejemplo, de la recepción a las jovencísimas damas de este año, del pregón de Juan Agustín Regalado o de la actuación de la Orquesta Seven.

Sin embargo, esa comodidad nocturna al poder estar en manga corta se transformó en agobio en la mañana del jueves al ponerse los vecinos de La Fuente sus mejores galas para asistir a la parte más solemne del bloque festivo, que se abrió como siempre con una misa en el templo parroquial a cargo del sacerdote Anselmo Matilla, que debutaba al frente de los actos del Corpus en La Fuente. Anselmo Matilla estuvo acompañado de numerosos sacerdotes de los alrededores en la misa, que fue cantada por el Coro San Esteban.

Tras algo más de una hora de eucaristía, llegó el momento tan esperado de desarrollar la procesión por las calles de la localidad, por las que había distribuidos varios altares, empezando por la renovada Plaza Mayor ?se ha colocado un nuevo pavimento-, donde se situó un gran altar a las puertas del Ayuntamiento, donde se colocaron varios niños, al igual que en el resto de altares (excepto en el último).

Debido al calor, este año los padres y madres tuvieron que estar mucho más pendientes de sus hijos pequeños a la hora de situarlos en esos altares, donde fueron bendecidos por el Santísimo Sacramento, que fue portado durante la mayor parte de la procesión por Anselmo Matilla.

En esta ocasión, las mayordomas de la celebración fueron Rosario Sánchez y Teresa Ballesteros, que desfilaron junto a varios niños que han tomado esta primavera la Primera Comunión delante del palio del Santísimo. Detrás del mismo, y un poco perdidos entre la multitud, estaban los miembros de la Corporación Municipal de La Fuente con su alcalde Manuel Rufino García al frente, quién estuvo acompañado durante el desfile procesional del presidente de la Diputación Provincial, Javier Iglesias, y de representantes de la Guardia Civil.

Tras un recorrido como decíamos marcado por el intenso calor, se regresó al templo, donde se dio por concluida esta parte religiosa, para iniciar a partir de ese momento el tiempo de disfrute, sobre todo en los bares. Durante la tarde, habrá un partido de pelota en colaboración con el bar de las piscinas, y se montará un parque infantil en el Polideportivo. Mientras, la velada del jueves estará protagonizada por la Orquesta Cañón.

Las actividades del viernes comenzarán a media mañana con un encierro infantil con carretones. A las 13.00 horas tendrá lugar un encierro animado por la Charanga Al Rojo, al que seguirá la clásica guerra de agua, que este año será muy agradecida. Por la tarde, a las 18.15 horas, se producirá el desfile de peñas y disfraces, y la recepción a la Reina y Damas de las fiestas. A las 19.00 horas se soltará el desencierro, y además habrá otro desencierro nocturno a las 23.30 horas. La animación musical de la noche del viernes la pondrá la Orquesta Pensilvania.

La jornada del sábado tendrá por la mañana el mismo programa que el viernes: un encierro de carretones, el encierro tradicional con novillos y una guerra de agua. Por la tarde, será turno para el desfile de carrozas desde las 18.30 horas, que estará seguido por un desencierro con novillos. La esperada velada sabatina contará con la animación de la Orquesta Colores y de una disco móvil con go-gós.

El último día de las fiestas, el domingo, se iniciará a las 11.00 horas con una misa. A las 13.30 horas, tendrá lugar el encierro a caballo con novillos (animado por la Charanga Al Rojo), mientras que a la hora de comer se repartirá paella para todos en la Plaza Mayor. Como cierre de las fiestas, habrá una clase práctica de la Escuela de Tauromaquia de Salamanca con la participación de Manuel Diosleguarde y Valentín Hoyos, y una capea al estilo tradicional con dos novillos.