Viernes, 19 de abril de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
Los dones de Dios
X

Los dones de Dios

Actualizado 11/06/2017
Redacción

"El Señor, el Señor: un Dios clemente y misericordioso, paciente, lleno de amor y fiel" (Ex 34,7). Así se presenta y se califica el mismo Dios en un momento especialmente dramático.
Adorando a un becerro de oro, el pueblo de Israel había quebrantado la alianza que Dios le había dispensado. Al darse cuenta de lo que estaba ocurriendo, Moisés lanzó contra las rocas las dos tablas de piedra en que estaban escritos los mandamientos.
Ahora Moisés vuelve a subir al monte Sinaí con las nuevas tablas de piedra, que sustituyen a las antiguas. El Señor se muestra benigno, compasivo y dispuesto a renovar la alianza. A Moisés solo le queda pedir al Señor que acompañe a su pueblo, aunque sea un pueblo obcecado.
Al final de la primera carta a los Corintios, san Pablo desea que el Dios Trinidad derrame sobre los fieles tres dones sagrados: la gracia de Jesucristo, el amor del Padre y la comunión del Espíritu Santo (2Cor 13,11-13).
LA CONDENA
El evangelio que se proclama en esta fiesta de la Santísima Trinidad recoge una parte de los comentarios que el evangelista añade a las palabras que Jesús dirige a Nicodemo (Jn 3,16-18). En este breve texto llaman la atención las alusiones a la condenación.
? "Dios no envió a su Hijo al mundo para condenarlo". Es bueno comenzar con esa afirmación. La misión de Jesús no tiene por objeto la condenación de este mundo. Bastaría saber que Jesús pasó por el mundo haciendo el bien.
? "El que cree en él no será condenado". La fe en Jesucristo no se reduce a la afirmación de algunas

verdades abstractas. Tampoco se limita a regular algunos ritos o ceremonias. Creer en Jesús es aceptarlo como Salvador. ¿Cómo va a ser condenado quien se identifica con él?

? "El que no cree en él ya está condenado". Nadie será condenado por no haber creído en Jesucristo. El mismo rechazo del Salvador ya es en sí mismo una lamentable condenación. Lo penoso de rechazar su Luz es haber elegido vivir en la tiniebla.
Y LA SALVACIÓN
"Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo único para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna" (Jn 3,16). La primera parte del texto evangélico de hoy es un maravilloso ventanal que nos abre al horizonte de los grandes dones de Dios:
? El amor de Dios al mundo." ¿Es que Dios puede dejar de amar al mundo que ha creado para derramar sobre él su bondad? El amor de Dios sostiene el mundo material y, más aún, el mundo social en el que nos insertamos.
? La entrega de Jesús y la fe. Si el amor de Dios se muestra en la creación y en la providencia, se revela sobre todo en el envío de su Hijo. Creer es aceptarlo como Señor y Salvador de nuestra existencia
? La vida eterna. La vida es el primero de los dones de Dios. La vida humana ha de ser acogida con gratitud y responsabilidad. Pero saber que nuestra vida puede ser eterna en Dios es el mayor premio a esa fe, que también nos ha sido dada.
- "Gloria al Padre, y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén".
José-Román Flecha Andrés

La empresa Diario de Salamanca S.L, No nos hacemos responsables de ninguna de las informaciones, opiniones y conceptos que se emitan o publiquen, por los columnistas que en su sección de opinión realizan su intervención, así como de la imagen que los mismos envían.

Serán única y exclusivamente responsable el columnista que haga uso de nuestros servicios y enlaces.

La publicación por SALAMANCARTVALDIA de los artículos de opinión no implica la existencia de relación alguna entre nuestra empresa y columnista, como tampoco la aceptación y aprobación por nuestra parte de los contenidos, siendo su el interviniente el único responsable de los mismos.

En este sentido, si tiene conocimiento efectivo de la ilicitud de las opiniones o imágenes utilizadas por alguno de ellos, agradeceremos que nos lo comunique inmediatamente para que procedamos a deshabilitar el enlace de acceso a la misma.

Comentarios...