Confederación rechaza el anteproyecto de la pasarela y da otras pautas para hacer otro

Los mirobrigenses deberán seguir esperando para poder contar con una pasarela en la zona de los pontones que conectan el Camping Municipal con la isla de El Picón, tras interponerse nuevamente en el camino la Confederación Hidrográfica del Duero (un órgano que hay que recordar que depende del Gobierno de España).

Concretamente, lo que ha ocurrido ahora es que la Confederación ha rechazado el anteproyecto de construcción de una pasarela que había presentado el Ayuntamiento mirobrigense, que se había elaborado siguiendo las nociones que se habían marcado desde la propia Confederación. Ahora, éste organismo ha dado otras pautas, con las cuales el Consistorio mirobrigense va a elaborar un proyecto que se espera que sí reciba el visto bueno.

Esas fueron las conclusiones de una doble reunión mantenida el lunes de la semana pasada con técnicos de la Confederación Hidrográfica del Duero en la sede de la propia Confederación en Valladolid por el concejal de Relaciones Institucionales y Medio Ambiente del Ayuntamiento, Domingo Benito; el arquitecto municipal Miguel Ángel Manzanera; y el ingeniero de montes y caminos que había elaborado el anteproyecto de construcción de una pasarela con un coste de unos 55.000?.

Como publicamos el pasado mes de enero, el Ayuntamiento había decidido encargar ese anteproyecto (que evidentemente tiene un coste económico) después de recibir por parte de la Confederación una "mínima seguridad" ?como lo definió Domingo Benito en ese momento- de que se le iba a dar el visto bueno, al hacerse un proyecto técnico por parte de un ingeniero de montes y caminos ?que suele trabajar con la Confederación- siguiendo sus pautas.

De este modo, se planteó una estructura basada en una instalación fija con elementos desmontables a base de tubos. Con el anteproyecto ya listo, el Ayuntamiento solicitó una reunión hace ya unos meses con la Confederación ("en febrero o en marzo", según indica Domingo Benito), pero hasta el último lunes de mayo no fueron recibidos en la sede de la Confederación.

Como decíamos más arriba, allí tuvieron una doble reunión donde se encontraron con la desagradable 'sorpresa' de que no se le da el visto bueno al anteproyecto, ya que la Confederación "no lo ve viable", cuando justamente era "el que se había dicho desde Confederación que se podía hacer", como insiste Domingo Benito. El problema estaría en que ahora la Confederación quiere que prácticamente no haya elementos permanentes.

Se ha encargado el proyecto con las nuevas pautas

Con esa nueva idea central sobre la mesa, en la cita del pasado lunes 29 de mayo "se definieron los criterios por dónde se podría hacer". Según apunta Domingo Benito, sería parecida al anteproyecto ya elaborado, "pero con condicionantes", concretamente que el "80-90% de la pasarela sea desmontable", y que pueda absorber "una avenida de 100 años".

Con estas nuevas indicaciones, el Ayuntamiento ha decidido encargar de forma definitiva al mismo ingeniero de montes y caminos el proyecto de construcción de la pasarela (hasta ahora sólo se había hecho el anteproyecto para no perder tanto dinero por si se daba esta circunstancia de que se tiraba para atrás).

Una vez el proyecto con las nuevas pautas esté redactado, se presentará a la Confederación, esperando que por fin se le dé el visto bueno y pueda comenzar la ejecución. El Ayuntamiento había previsto en el Presupuesto Municipal llevar a cabo la construcción durante este ejercicio, pero a este ritmo parece complicado que las obras puedan empezar en 2017.

Según subraya Domingo Benito, "el Ayuntamiento está haciendo lo que está en su mano y sigue dando los pasos; nos gustaría que fueran más rápidos, pero los marca la Confederación", remarcando asimismo que "hemos ido cuando nos han recibido".

Hay que recordar que la idea de poder contar en la zona de los pontones con una pasarela tuvo su 'germen' en la colocación por parte de varios vecinos de los barrios aledaños al río -por su cuenta y riesgo- de una pasarela artesanal en el verano de 2014 que fue muy aplaudida y que no le hizo mal a nada ni nadie, pero cuyos ideólogos estuvieron a punto de ser multados por la propia Confederación.