Los salmantinos realizaron uno de sus mejores partidos de la temporada ante un rival que ya no se jugaba nada. El Santoña no ayudó y perdió en Guadalajara
El pabellón Río Tormes se convirtió en una olla a presión para llevar al BM Ciudad de Salamanca hacia la salvación de la categoría. Enfrente tenía al BM Soria, un rival que ya no se jugaba nada, pero que intentó ponerle las cosas difíciles desde el principio.
Los locales salieron con intensidad, y pese a comenzar perdiendo (0-1) remontaron hasta el 4-2 con 8 minutos jugados. Los sorianos no vinieron a pasearse a Salamanca y se volvieron a poner por delante con un parcial de 2-5 que puso el marcador en 6-
La intensidad defensiva, más la presión ambiental volvieron a poner por delante a los salmantinos que jugaron sus mejores minutos en la recta final de la primera parte, llegando incluso a tener una ventaja de 3 goles (12-9). El técnico visitante paró el partido.
Jorge Lafuente era el único que inquietaba la portería del BM Ciudad de Salamanca. Terminó la primera parte con siete goles de los catorce de su equipo (16-14).
En la segunda parte los salmantinos sabían que tenían que echar el resto. Guadalajara estaba ganando de forma sorprendente al Santoña, líder de la competición, y la victoria era necesaria. Un parcial de 5-2 daba cinco goles de ventaja a los locales (21-16). Las cosas parecían tranquilas en el Río Tormes, que no paraba de animar a los suyos. Además el parcial seguía creciendo (26-20) a 15 minutos del final.
Las cosas ya no variaron mucho hasta el final del choque donde el BM Ciudad de Salamanca se limitó a mantener las diferencias en el marcador. Al final triunfo de los salmantinos por 31-24, un marcador que permitirá mantenerse a los charros una temporada más en
Fotos: Alejandro López