Suponen el 17,7% de la población, que cuenta con menos de 8.209 euros anuales, una tasa que desciende seis décimas, mientras aumenta en España
El número de castellanos y leoneses que viven en riesgo de pobreza es de unos 434.000, es decir, el 17,7% del total, según la Encuesta de Condiciones de Vida del INE, que calcula el porcentaje de personas que está por debajo del umbral de pobreza. Este umbral es en 2016 (para los hogares de una persona, calculado con los ingresos de 2015) de 8.209 euros, el 2,5% más que el año anterior. En hogares compuestos por dos adultos y dos menores de 14 años, dicho umbral fue de 17.238 euros.
Mientras en el conjunto de España el porcentaje de hogares en riesgo de pobreza alcanza el 22,3%, dos décimas más que un año antes y más de cuatro puntos por encima de la tasa regional, en el caso de Castilla y León se produce un descenso de seis décimas frente al dato de 2015. El techo se produjo en 2014, con el 20,4%, es decir uno de cada cinco hogares.
Los resultados de la encuesta, realizada en la primavera de 2016, ofrecen información sobre los ingresos medios de los hogares durante el año 2015. Medido en términos netos, se situó en España en 26.730 euros, con un incremento del 2,4% respecto al año anterior. En Castilla y León fueron 25.255 euros y en este caso registraron un incremento menor en la comunidad autónoma: son 417 euros más que un año antes (1,7%), frente al aumento de 638 euros (2,4%) del conjunto del país. Por su parte, el ingreso medio por persona alcanzó los 10.708 euros de media nacional, cifra un 2,8% superior a la registrada el año precedente. El dato autonómico es de 10.815 euros, con alza del 2,3%, o en euros 245.
Con respecto a los resultados de un año antes, disminuyen los hogares castellanos y leoneses que no pueden permitirse ir de vacaciones al menos una semana al año (suponen el 30,4%, frente al 38,7% anterior o el 39,5% de toda España); los que no pueden permitirse una comida de carne, pollo o pescado al menos cada dos días (1,9%); lo que no pueden mantener la vivienda con una temperatura adecuada (3,6%); y los que no tienen capacidad para afrontar gastos imprevistos (24,5%), apartados todos ellos en los que la región presenta resultados mejores que la media nacional.
Por el contrario, aumentan ligeramente los hogares que han tenido retrasos en el pago de gastos relacionados con la vivienda principal (hipoteca o alquiler, recibos de gas, comunidad...) en los últimos 12 meses (4,4%); los que no pueden permitirse disponer de un automóvil (4%); y los que no pueden disponer de un ordenador personal (3,8%).
Llegar a fin de mes
Los hogares de la región que sufren algún tipo de dificultad para llegar a fin de mes pasan a ser menos de la mitad, en concreto el 45,5%, frente al 51,6% del año anterior y al 60,9% del conjunto de España.
Más en detalle, el 5,2% declaran llegar con mucha dificultad (el tercer porcentaje más bajo por comunidades, tras el 4,8% de Asturias y el 5,1% de Aragón; y con una media nacional del 15,3%); los hogares que llegan al día 30 con dificultad son el 12,8% y los que pasan "ciertas dificultades" suponen el 27,5%. Solo el 0,8% de las familias de la comunidad llegan a fin de mes con mucha facilidad, unas pocas más que en 2015, cuando eran el 0,6%
Por otra parte, el 83% de los hogares autonómicos tienen la casa en propiedad, un punto porcentual menos que un año atrás pero seis más que la media nacional (77,1%). Aumentan notablemente los hogares que viven de alquiler a precio de mercado y ya suponen el 9,2%, frente al 7,6% de doce meses atrás.