El presidente de la FEDEM, Juan Luis Feltrero, afirma que hacer frente al relevo generacional o a la competencia desleal son retos de un sector que factura entre 160 y 200 millones en España
Salamanca reúne hasta el sábado a un centenar de empresas de mudanzas y a más de 200 profesionales en el VIII Congreso Nacional, que se celebra después de ocho años, y que este viernes cuenta con la presencia del consejero de Fomento, Juan Carlos Suárez-Quiñones. Juan Luis Feltrero, presidente de la Federación Española de Empresas de Mudanzas (FEDEM), y Mariano Sánchez, de la Asociación Castellano y Leonesa (ACLEM) han destacado que dignificar el sector, analizar el pasado y el futuro del negocio, el reto del relevo generacional, hacer frente a la competencia desleal y favorecer el asociacionismo son algunos de los temas que se abordarán en las diferentes jornadas del congreso.
El responsable regional ha hecho referencia a la crisis que ha atravesado el sector de las mudanzas entre los años 2009 y 2103, con una caída de la facturación que alcanzó el 45%. En Castilla y León, explicó Mariano Sánchez, actualmente son 45 las empresas que trabajan en este sector, con unos 450 trabajadores , una flota de vehículos de 280 y una facturación que alcanza los 16 millones de euros.
Por su parte, el responsable nacional de FEDEM ha remarcado la alta cualificación de los profesionales que trabajan en un sector que, en el ámbito nacional, lo integran 500 empresas, 5.00o empleados, una flota de 4.500 vehículos y un volumen de negocio entre 160 y 200 millones. "Es un sector importante que hay que dignificar y regularizar". A la competencia desleal se suma, explicó Feltrero, el problema de la normativa medioambiental y las medidas que están tomando las ciudades para evitar la entrada de vehículos contaminantes en sus cascos urbanos. "Es esencial que las administraciones nos ayuden para cambiar la flota por vehículos menos contaminantes", teniendo en cuenta que buena parte del trabajo de las empresas de mudanzas, más del 80%, se realiza en el casco urbano.
Fotos: Alejandro López