Ya cuenta con relevantes proyectos en este sector en varios países de Europa: Reino Unido, Alemania y Francia
Iberdrola, a través de AVANGRID, se ha adjudicado en la subasta celebrada ayer los derechos para desarrollar y construir un parque eólico marino de hasta 1.486 MW de capacidad en la zona conocida como Kitty Hawk, a 24 millas náuticas de la costa de Carolina del Norte, en Estados Unidos. Con esta adjudicación, Iberdrola podrá aplicar su know-how al desarrollo del sector eólico marino emergente en Estados Unidos, cuya costa este reúne óptimas condiciones de profundidad y recurso eólico.
En la subasta, organizada por la Agencia para la Gestión de la Energía Oceánica -Bureau of Ocean Energy Management (BOEM)- la oferta de Iberdrola consiguió superar a las presentadas por la compañía noruega Statoil, la empresa norteamericana Wind Future y la alemana WPD Offshore Alpha. Otras compañías precalificadas para la licitación, como las canadienses Enbridge y Northland Power y la filial de energía eólica de Royal Dutch Shell, decidieron no concurrir en el último momento.
A partir de ahora, Iberdrola tendrá un plazo de un año para presentar una primera evaluación del potencial eólico de la zona a BOEM para su aprobación, tras la cual dispondrá de 54 meses para presentar el proyecto de ingeniería para la construcción y operación del parque.
Con esta adjudicación, Iberdrola se convierte en la principal compañía eléctrica del mundo en el sector de la eólica marina, gracias a un plan de inversiones perfectamente trazado y ejecutado en el que ha conseguido obtener, merced a un excelente equipo de ingenieros, las competencias y experiencia necesarias para competir con éxito en un sector altamente especializado.
La eólica marina, una apuesta de futuro para Iberdrola
Iberdrola ha apostado de forma decidida por la energía eólica marina como una de las claves del futuro de la compañía. Los países elegidos para desarrollar su actividad en este nuevo negocio son, de momento, Reino Unido, Alemania, Francia y Estados Unidos.
La compañía alcanzó un hito en 2014, al convertirse en la primera empresa española en poner en marcha un parque eólico, el de West of Duddon Sands (WoDS). Iberdrola desarrolló este proyecto a través de su filial británica ScottishPower Renewables y en consorcio con la empresa danesa Dong, invirtiendo entre ambas más de 1.600 millones de libras. WoDS dispone de una potencia es de 389 MW, que le permiten producir energía eléctrica suficiente como para cubrir la demanda de aproximadamente 300.000 hogares británicos.
El parque marino está situado a unos 20 kilómetros de Barrow-in-Furness, en la costa noroeste de Inglaterra y desde su puesta en marcha ha obtenido unos extraordinarios resultados, tanto de producción como de disponibilidad en horas. WoDS cubre un área de unos 67 kilómetros cuadrados (km2) y sus turbinas, que han sido suministradas por la empresa alemana Siemens, tienen una capacidad unitaria de 3,6 MW.
En la actualidad Iberdrola está construyendo el parque de Wikinger, en aguas alemanas del mar Báltico, que supondrá una inversión de cerca de 1.400 millones de euros y dispondrá de una potencia de 350 MW, cubriendo las necesidades de más de 350.000 hogares alemanes y evitando la emisión a la atmósfera de casi 600.000 toneladas de CO2 al año. La instalación está ubicada a unos 75 kilómetros de distancia de la costa y entrará en funcionamiento a partir de octubre de 2017.
Igualmente, Iberdrola se prepara para comenzar el próximo año la construcción de su tercer proyecto marino, el parque eólico de East Anglia One, de 714 MW de potencia que suministrarán energía limpia a más de 500.000 hogares ingleses, el mayor proyecto español de la historia en el sector de las renovables y el mayor parque eólico marino del mundo cuando entre en funcionamiento en 2020 tras una inversión de 2.500 millones de libras. Siemens será la encargada de suministrar 102 turbinas de 7 MW de capacidad unitaria para este parque marino, que serán construidas por el fabricante alemán en sus nuevas instalaciones ubicadas en la localidad Hull, en el noreste de Inglaterra.
Además, Iberdrola ha solicitado al Gobierno británico ampliar esta instalación hasta los 2.000 MW. Para ello, ha presentado a las autoridades del Reino Unido una propuesta para construir el parque East Anglia Three, que dispondría de 1.200 MW de potencia.
A estas nuevas instalaciones se sumará la de Sant Brieuc (496 MW), en aguas francesas, cuya entrada en operación se prevé para 2022. Este parque eólico tendrá una potencia de 496 MW y estará ubicado en la bahía de Saint-Brieuc, frente a la costa de la Bretaña francesa, a 20 kilómetros mar adentro y a unos 100 kilómetros de la ciudad de Rennes.
El parque marino contará con 62 turbinas de 8 MW de potencia de última generación, distribuidas sobre una superficie de 75 km², que tendrán sello español, ya que han sido encargadas a Adwen, empresa de Gamesa dedicada al sector eólico marino.
Esta instalación, que desarrolla Iberdrola en colaboración con la empresa RES y Caisse Des Dépôts, se convertirá, cuando entre en operación, en el cuarto parque de eólica marina de la empresa. La producción de energía se prevé que permita satisfacer el consumo de electricidad equivalente a 850.000 habitantes.