Miguel Hernández...un poco más en el 75 aniversario de su fallecimiento

Cercanas -las muchas conmemoraciones- qué a lo largo de 2017 se celebraran en honor de Miguel Hernández, gran escritor y poeta, en el aniversario de su 75 fallecimiento, deseo rendir desde la imparcialidad un humilde homenaje, al hombre envuelto en blanco y negro, entre vacios e infinitas dudas.

EL RAYO QUE NO CESA

(1934-1935)

A ti sola, en cumplimiento de una promesa que habrás olvidado como si fuera tuya.

Un carnívoro cuchillo

de ala dulce y homicida

sostiene un vuelo y un brillo

alrededor de mi vida.

Rayo de metal crispado

fulgentemente caído,

picotea mi costado

y hace en él un triste nido.

Mi sien, florido balcón

de mis edades tempranas,

negra está, y mi corazón,

y mi corazón con canas.

Tal es la mala virtud

del rayo que me rodea,

que voy a mi juventud

como la luna a mi aldea.

Recojo con las pestañas

sal del alma y sal del ojo

y flores de telarañas

de mis tristezas recojo.

¿A dónde iré que no vaya

mi perdición a buscar?

Tu destino es de la playa

y mi vocación del mar.

Descansar de esta labor

de huracán, amor o infierno

no es posible, y el dolor

me hará a mi pesar eterno.

Pero al fin podré vencerte,

ave y rayo secular,

corazón, que de la muerte

nadie ha de hacerme dudar.

Sigue, pues, sigue cuchillo,

volando, hiriendo. Algún día

se pondrá el tiempo amarillo

sobre mi fotografía.

Poemas dedicados "supuestamente" a tres mujeres que marcaron su vida, la magnífica pintora Maruja Mallo, la poeta María Cegarra, y su esposa Josefina Manresa.

Siempre he oído y demasiadas veces leído, que Miguel Hernández fue escritor autodidacta, cabrero, muy humilde y de pocas letras.

Horas son de hacer justicia, que desaparezcan los tópicos, o mentiras, que tanto ser dichas como verdades, se terminan creyendo como "autenticas".

Hernández no fue analfabeto o semi, ni autodidacta, ni pobre. Durante diez años (poco frecuente en aquellos tiempos) estudió. Su familia si bien no era acaudalada y procedía de la nobleza, era una gente austera, pero no pobre, gran traductor de latín y lector de francés. Es cierto que al dejar de estudiar se dedicó durante cinco años al pastoreo, luego emprende marcha desde su Horigüela natal a la gran urbe Madrid.

Hagamos justicia al personaje utilizado por la derecha: Cito personas que dejaron huella: Juan Guerrero Zamora escribe posiblemente la primera biografía de Miguel Hernández, dónde le convierte en una persona muy religiosa, que se equivocó de lugar y momento, era un personaje adorable y muy apreciado, independientemente de su militancia, amigos estos, del bando franquista, que jamás rompieron la relación que mantenían con él, Cossío, José Mª Alfaro, Dionisio Ridruejo Rafael Sánchez Mazas (ministro con Franco),todos de un gran peso político y social, que a su muerte se siente dolidos, dañados, invadidos por tremendas dudas dentro de su alma.

La izquierda le convierte en la bandera antifranquista y solo le interesó encontrar el poeta beligerante y de versos comprometidos. Poco favor se le hace al gran escritor, sereno y pacifico incluso cuando estuvo encarcelado, al poeta enamorado, al que en papel higiénico escribe hermosos cuentos a su hijo Manolillo.

No quieren -la derecha- cometer en tremendo error con Hernández, cómo ocurrió con Lorca. Recordando la historia desinteresada, nos muestra una derecha que adoraba a Lorca, entre otros Rosales, y una izquierda que soñó con una España igual, un mundo idílico, pero dentro de esa izquierda también hubo sacas, asesinatos a curas, religiosos y monjas por su credo, solo por eso, quema de conventos, etc.

Consiguen indultar a Miguel Hernández de la pena de muerte, tenía que cumplir una condena de treinta años y un día?pero su vida se terminó antes de llegar a ese número

Es acusado D. Luis Almarcha, religioso, de tener mucha responsabilidad en su muerte. Almarcha deseaba que su casamiento fuera por la iglesia, estaba Miguel casado por lo civil y esto con la entrada de Franco carecía de validez. Sí se casaba por la iglesia, favorecía a Josefina su esposa y Manolillo su hijo, entonces el religioso consentiría que fuera traslado de prisión a un Hospital de Valencia, pero su enfermedad estaba en un punto irreversible. Josefina insiste que diga sí a todo, le presiona, pero si cede, dejaría de ser el ejemplo o espejo en qué se miraban los compañeros de celda. Debido a su insistencia en el -no- Cossío se distancia de Miguel, mientras Alberti le insiste que siga, pero el pillo Alberti y su esposa Mª Teresa León, sé exilian huyendo en taxi, y Miguel queda en tierra, unos hacían la guerra desde el despacho como Alberti, observan y condenan desde la comodidad y abundancia, desconocen el campo de batalla.

No fue Miguel Hernández un intelectual, pero sí una persona de gran talento, con gran capacidad memorística. Resumiendo, queda mucho por descubrir de éste hombre, ojalá que ninguna persona dedicada a la creatividad, consideren propiedad de partidos políticos, regímenes o intereses políticos.

Qué la obra y persona de Miguel Hernández pierda el aroma a cabra e incultura, a izquierda, o derecha, y demos el justo valor a un hombre con una sensibilidad especial. Desde la estrella que a buen seguro después de 75 años, en 2017 va brilla con más luz, jamás titubeemos en dar al escritor, pintor, escultor etc el valor que tiene por su obra, sin credos, banderas e ideas

NO DESEO

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No deseo noches inciertas

Miedo en las calles,

Odio en los gestos.

No deseo que banderas parcelen mi tierra,

Establezcan dominios

O se vistan con trajes que obligan a un credo

No deseo

que mi hijo lleve fusiles con la muerte al hombro

No deseo

Que disparen balas que no sean poemas

Tenga que amar en secreto y llorar en silencio

¡No! No quiero que endulcen mi boca con falsos sueños

(fragmento del poemario Dios en mi camino)

Isaura Díaz de Figueiredo