Las "primarias", negocio redondo para el PP

Le cuentan a "El Topillo" que, con los 270 compromisarios elegidos en Castilla y León para participar en el próximo congreso nacional del partido, el PP ha hecho un negocio redondo. Políticamente, dicho sucedáneo de primarias le ha permitido exhibir la imagen de que en las sedes del PP hay urnas, aunque los que se han fotografiado junto a ellas han sido precisamente dirigentes y cargos públicos que, al ser compromisarios natos, no se sometían a ese escrutinio.

Pero todavía más rentable ha sido el resultado económico de la operación. Ello a causa de que, Estatutos en mano, tanto para ser elector como elegible era requisito imprescindible estar al corriente en el pago de las cuotas de afiliación. Requisito éste que ha obligado a unos y a otros, electores y elegibles, a ponerse al día, lo cual ha supuesto toda una inyección económica con la que están encantados los tesoreros provinciales del partido.

Se comenta también que a algunos de los compromisarios elegidos la cosa se les ha puesto por un pico. El motivo es que, para garantizarse la elección, se han hecho cargo de las cuotas pendientes de pago de otros afiliados "morosos" que estaban dispuestos a acudir a votarles, pero no a ponerse al día con la tesorería. Solamente en Valladolid y provincia, "El topillo" ha constatado tres casos, dos de ellos en la capital, donde había 26 candidatos para 14 plazas de compromisario.

En algunos sitios, la votación ha servido para medir fuerzas entre distintas corrientes que están llamadas a competir en los próximos congresos provinciales del partido, a celebrar, si se cumplen las previsiones, antes del próximo verano. Sin ir más lejos, en Valladolid los altos cargos de la Juntaen liza, la consejera Pilar del Olmo y el director general Luis MiguelGonzález Gago, no han sido, ni de lejos, los más votados. Mucho mayor respaldo han conseguido otros, como la ex concejal y antigua jefa de Gabinete del alcalde León de la Riva, Paloma Vallejo, o el portavoz del grupo municipal popular en el Ayuntamiento, Jesús Enríquez Tauler. Y no consta que ninguno de estos dos últimos haya sido los que se han rascado el bolsillo para pagar las cuotas atrasadas de otros correligionarios "morosos". En el caso de Enríquez, tal cosa, la de rascarse el bolsillo, no era imaginable.