Los dueños de dos construcciones irregulares solicitan la licencia para ajustarlas a la legalidad...

La Comisión de Urbanismo del Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo celebró una nueva sesión en la mañana del viernes entre cuyos puntos del orden del día estuvo el dar cuenta de dos expedientes de restauración de la legalidad urbanística que parece que van a culminar de forma inmediata, lo que viene a confirmar, según expresan desde fuentes municipales, que "el actual Ayuntamiento no va a permitir" ninguna ilegalidad urbanística a diferencia de lo que pudo ocurrir en legislaturas pasadas.

Esos dos expedientes se refieren a sendas construcciones iniciadas durante esta legislatura. Por un lado, una construcción en un suelo rústico común con protección ubicado en el entorno de la Avenida de Béjar, y unas obras en el entorno de Las Picadas que no han sido acordes al proyecto presentado al Ayuntamiento, según detectaron los servicios municipales.

Ante esta situación, el Consistorio ordenó restaurar la legalidad, en el caso de la primera construcción, derribando lo construido de tal modo que todo quede en el estado original que tenía antes de las obras de edificación, y en el caso de la segunda, ajustándose a lo que decía ese proyecto presentado para el cual se solicitó el permiso de obras.

Los dueños de ambas construcciones presentaron alegaciones, pero finalmente han decidido desistir de alegar, y llevar a cabo la operación de restauración de la legalidad, para lo que ya han solicitado las correspondientes licencias de obras, que implican el levantamiento de la suspensión de la obra y el precinto que pesaba sobre ambas construcciones.

Una vez se concluyan las obras de restauración, los técnicos municipales comprobarán que efectivamente todo se ajusta a la legalidad. Con ello, concluirían esos expedientes, que son el 2º y el 3º que se abren esta legislatura por construcciones irregulares. El primero que se abrió también concluyó del mismo modo, procediendo sus dueños a restaurar la legalidad.

Desde el Ayuntamiento mirobrigense se expresa que se va a estar "vigilante" para el cumplimiento de la plena legalidad urbanística en todas las obras que se hagan frente a lo ocurrido en épocas pasadas.