VILLARINO DE LOS AIRES | La lluvia impidió comer la merienda al aire libre, no así la celebración de los actos religiosos, el baile en honor al Santo y el convite
La lluvia no fue obstáculo para que los vecinos de Villarino acudieran fieles a su cita con el Teso de San Cristóbal. Aunque no fue posible comer el hornazo y los asados de carne al aire libre, nada impidió celebrar los actos en honor al Santo, los bailes charros bajo las notas de la gaita y el tamboril de Daniel Martín Anaya, y el convite de chochos y aceitunas con vino de La Ribera. Así pues, las meriendas se trasladarían a las bodegas de cada cual para celebrar el siempre anhelado 'día del Teso' del Lunes de Pascua, y concluir con un baile en el Teleclub.