Castilla y León se mantiene a la cabeza nacional en la atención a la dependencia

La atención a la dependencia en la comparativa nacional entre comunidades vuelve a obtener la mejor nota en Castilla y León, que repite un sobresaliente. El Observatorio de la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales ha presentado su XVI evaluación con el aumento de su escala de valoración para considerar tanto el empleo generado en el tercer sector como dos ratios importantes, el de la relación entre el número de prestaciones y el beneficiario como un indicativo de calidad y el de servicios de proximidad, prestaciones económicas y en correlación también con los centros de día o la teleasistencia.

La Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades ha obtenido así, como en las catorce valoraciones anteriores, el puesto de cabeza nacional, con el doble de puntos que la media española y un sobresaliente, como en los últimos ocho años. Concretamente ha sumado 8,6 puntos (12 puntos sobre 14 posibles) que hubieran sido 9,2 con la antigua y que solo recogen un ligero descenso desde el 10 de 2014.

Los datos analizados por este observatorio se cierran a 31 de diciembre de 2015 y comparan solicitudes, dictámenes, personas que con derecho a ello no reciben prestaciones, el equilibrio entre los servicios y las ayudas económicas... evalúa en definitiva la capacidad de gestión, la agilidad en la tramitación, la generación de empleo y las inversiones en todo ello. Un apartado en el que Castilla y León vuelve a mostrar que no se necesario gastar más para atender más. Entre los puntos fuertes de la comunidad está el que, al ser una autonomía que ya partía de la atención plena, la incorporación del nuevo Grado I al sistema no ha sido un gran problema y la ha absorbido sin dificultades y su lista de espera ya está por debajo del 10%.

La generación de puestos de trabajo por millón de gasto público es la más alta de España y presenta una tasa de retorno del 40,4%. Este dato positivo se debe a la apuesta de la Junta por el impulso de la atención vinculada, una prestación que le aporta dinero al beneficiario para invertirlo en servicios. Entre los puntos más débiles, esta evaluación detecta que el 22,9% de las personas dictaminadas no obtienen grado y que hay una pérdida de dependientes de Grado III, del 3,7%.

La siguiente puntuación más alta, después de la comunidad, es la de Andalucía con un 7,5 con la nueva escala;seguida del País Vasco (6,8) y de La Rioja (6,1) y la peor situada es la Comunidad Valenciana con un rotundo 0 ?en catorce evaluaciones nunca ha superado el 0,5?; seguida deCanarias, con un 0,7 y Aragón y Baleares, con un 21,1. Solo seis autonomías superan el aprobado.

Fuente El Norte de Castilla