Viernes, 10 de mayo de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
La bendición de animales por San Antón, cada año más popular
X
SAN ANTÓN, PROCESIÓN Y BENDICIÓN DE LOS ANIMALES

La bendición de animales por San Antón, cada año más popular

Actualizado 17/01/2016
Redacción Béjar

BÉJAR | Pese a que este año una indigestión del burrito ha obligado a trasladar al Santo en andas, la fiesta se ha celebrado con cientos de personas y sus mascotas (GALERÍA DE FOTOS)

[Img #532108]La fiesta de San Antón, con la bendición de los animales ha congregado, esta mañana, a numerosas mascotas, niños y adultos, que no han querido perderse la procesión y la degustación de las 630 manteladas con chorizo, acompañadas de refrescos, que el Ayuntamiento, ayudado de voluntarios del barrio de La antigua, ha repartido entre los asistentes, aunque ha habido gente que no ha podido disfrutarlas debido a la gran afluencia de público asistente

[Img #532161]Este año no ha habido burrito tirando del carro con el Santo, porque ayer comió demasiada hierba verde y el exceso de humedad de este alimento le ha producido una indigestión que ha suspendido su presencia en la procesión, no obstante, San Antón, ha sido trasladado en andas hasta la muralla, donde ha presidido la bendición de todas las mascotas, a cargo del párroco de Santa María, Félix Pérez.

Se ha nombrado abad de la Cofradía de San Antón a Eduardo Álvarez, se trata de una cofradía originaria del siglo XVI, que nació de la devoción al Santo en la desaparecida Iglesia de San Pedro y que el Párroco trata de recuperar.

La tradición popular, recogida en el blog de la Parroquia de Santa María, cuenta que en una ocasión, se le acercó a San Antón, una jabalina con sus jabatos ciegos y él les curó, desde entonces la madre no se separó de él y le defendió de cualquier alimaña que se le acercara. Pero con el tiempo, por la idea de que el cerdo era un animal impuro, se hizo la costumbre de representar al Santo, dominando la impureza, con un cerdo a sus pies.

Sin embargo la iconografía cristiana representa a San Antonio Abad, como un anciano barbado, que viste hábito talar con manto y capucha, que se apoya en un bastón con la tau griega. Le acompaña una esquila o campanilla para ahuyentar a los demonios, y el cerdo que lleva a sus pies, se interpreta como un animal del cual se extraía el tocino que curaba una enfermedad cutánea conocida como fuego de San Antón; a esta enfermedad aluden las llamas que salen de un libro que lleva en la mano, aunque también, en algunas representaciones, aparecen saliendo de sus pies. En otras ocasiones, se le representa llevando un rosario y el Libro de la Regla de los antonianos.

Comentarios...