Carbón para Juan Vicente

Se ignora como habrán sido de generosos los Reyes Magos con Juan Vicente Herrera en su domicilio burgalés, donde se supone que el presidente de la Junta recibió en la madrugada del miércoles la visita de Sus Majestades de Oriente. Lo que sí sabemos es que hoy, al reincorporarse al Colegio de la Asunción, se ha encontrado con un saco de carbón del que se extrae en las cuencas mineras leonesas.

El presente no procede de los mineros leoneses, que hace tiempo que dejaron de creer en los Reyes Magos, sino del sindicato agrario ASAJA, que cada año entrega ese regalo a aquella Administración, institución o empresa que no se ha distinguido precisamente por atender las demandas de agricultores y ganaderos. El carbón podía haber tenido como destinataria a la nueva consejera de Agricultura, Milagros Marcos, que ha consentido que su colega de Hacienda, Pilar del Olmo, le metiera a la consejería un recorte casi del 25 por ciento en el Presupuesto de la Junta para 2016.

Pero sea por la relación de paisanaje que une al presidente regional del sindicato, Donaciano Dujo, con la nueva consejera, sea porque el agravio con el sector va más allá de la propia consejería, el hecho es que ASAJA ha tirado por elevación y el carbón ha ido a parar al mismísimo Herrera. Desconoce "El topillo" si, en aplicación del "Código ético y de austeridad" aprobado para los altos cargos de la Junta (norma que supuestamente habrá obligado a devolver las decenas de regalos que llegan todas las Navidades al Colegio de la Asunción), el presente de ASAJA será devuelto o se donará a alguna institución benéfica de las muchas que mantienen centros calentados mediante calefacciones de carbón.

Mientras Herrera ha sido noticia a cuenta de ese regalo simbólico, el máximo responsable de la crítica situación de las cuencas mineras, esto es, el ministro de Industria, José Manuel Soria, lo era por dar la nota con su participación en la San Silvestre de Las Palmas de Gran Canaria. No porque un ministro no pueda participar en una prueba de este tipo, sino porque lo hizo sin inscribirse con su nombre, utilizando el dorsal asignado a su hija. Puesto que todavía falta para el carnaval y la carrera se corre a cara descubierta, tan estúpida "suplantación" no pasó inadvertida, costándole a Soria todo un vendaval de críticas. De paso sabemos que lo suyo no es el "running" (se clasificó en el puesto 2.539 entre 6.560 participantes) y que no sabe dosificar el esfuerzo, ya que se desfondó casi por completo en la segunda parte del recorrido?