En la imagen, de Hipólito Martín, un niño espera atónito y en silencio durante la última noche de reyes en Salamanca
"¡Qué ilusión la de los niños, Platero! No era posible acostarlos. Al fin, el sueño los fue rindiendo. Ahora, vamos a vestirnos con sábanas y colchas y sombreros antiguos. Y a las doce pasaremos ante la ventana en cortejo de disfraces y de luces, tocando almireces. ¡Platero, camellito mío!"
* Juan Ramón Jiménez, capítulo 122 de 'Platero y yo'
* En la imagen, de Hipólito Martín, un niño espera atónito y en silencio durante la última noche de reyes en Salamanca.