Los ganaderos de la comarca, en pie de guerra contra la Junta por la aplicación del CAP

La Asociación de Ganaderos Alto Águeda desarrolló en la mañana del martes un encuentro abierto en Ciudad Rodrigo con el objetivo principal de hablar sobre el Coeficiente de Admisibilidad de Pastos (CAP).

El encuentro tuvo lugar finalmente en el Centro Educativo Municipal de la calle San Fernando, después de recibir una sorprendente negativa a utilizar los locales de la Sección Agraria Comarcal de Ciudad Rodrigo.

Inicialmente, la Asociación había recibido el permiso por parte del jefe de Sección de Ciudad Rodrigo, pero en la mañana del lunes les llamó el jefe del Servicio de Agricultura y Ganadería de Castilla y León en Salamanca, Javier García Presa, porque no habrían hecho la solicitud por escrito, añadiendo que tiene orden de "no autorizar ninguna reunión privada". Sin embargo, este espacio ha acogido hasta ahora variadas actividades, incluidas algunas no relacionadas con el sector, como el Pregón del Alguacilillo cada Carnaval.

Para la Asociación Alto Águeda, la actitud de Javier García Presa es un intento de "impedir una reunión de ganaderos para defender nuestro sector", para que así "no se caldee el ambiente", según les habría llegado a expresar el jefe del Servicio. Según se explicó en la mañana del martes, la Junta está "intentando convencer a la gente [sobre el CAP] con grupos pequeños", añadiendo uno de los presentes que puede decir a ciencia cierta que "Javier García Presa está mintiendo descaradamente en todos los encuentros".

En torno a esta persona, se había solicitado una reunión con él, que en principio se iba a celebrar el jueves, pero finalmente la ha aplazado al lunes, para el día después de las Elecciones Generales. Los ganaderos no quieren achantarse, y así, han convocado una rueda de prensa para la mañana del jueves en la sede de Caja Rural, donde intentarán dar imagen de unidad y fuerza.

Precisamente, en el encuentro de la mañana del martes en Ciudad Rodrigo se habló de la importancia de que los ganaderos se asocien: "deberíamos ir de la mano para que todo fuera más fácil". Así, se explicó que en la comarca de Ciudad Rodrigo sólo están asociados (a Alto Águeda o a la Asociación 19 de Abril), un 6,5% de los 1.100 ganaderos que hay, que en total cuentan con 90.000 vacas nodrizas, y que han realizado 1.200 solicitudes de la PAC en 2015.

En la reunión se resaltó que es "la comarca más ganadera de Castilla y León", donde en total hay 14.900 ganaderos. Por ello, animaron a los presentes a unirse a alguna Asociación.

El gran problema del CAP

De los 5.800 ganaderos de la provincia de Salamanca, sólo 540 han recibido notificación de la figura que les cambia radicalmente su planteamiento, el CAP, la superficie "realmente admisible en los casos de superficie declarada de pastos". Este CAP afecta a aquellas zonas donde, por ejemplo, hay árboles, que dejan de estar consideradas como zona de pastos (aunque sea en ese entorno donde pasten los animales).

Aquellos que han recibido esa carta de notificación (o que se han preocupado por consultar a cuánto asciende el CAP en su caso), han visto que sus terrenos declarados de pastos se ven reducidos incluso hasta en un 82%, lo que tiene una importancia clave, ya que es a partir de esa superficie por la que se otorgan los Derechos de Pago Básico. En otros casos, directamente se considera el terreno como forestal, quedando fuera de los Derechos de Pago.

Por lo tanto, en la práctica totalidad de los casos, el CAP reduce la superficie admisible y los derechos de Pago Básico, algo que tiene indignado al sector con la Junta de Castilla y León, y especialmente con la Dirección General de la Política Agraria Común.

Para evitar estas reducciones, han comenzado a interponerse alegaciones, animando desde la Asociación Alto Águeda a que lo hagan todos, aunque sólo sea por una hectárea, para hacer fuerza ante la Administración.

Desde el punto de vista de Antonio García, presidente de la Asociación Salmantina de Agricultura de Montaña, "hay muchas posibilidades de arreglar esto, porque tenemos razón", considerando además que "ha habido ilegalidad por cómo se ha comunicado". De hecho, se está pensando incluso en presentar una "demanda colectiva" contra la Junta.

Como cierre de la sesión en el Edificio Educativo intervino un integrante de CHD Hábitat, entidad colaboradora del Programa Life Feeding Scavengers, que explicó a los presentes que desde 2013 tienen la posibilidad de volver a dejar los cadáveres en el campo (siempre que lo soliciten previamente), con el objetivo de que se los coman los buitres, para que así no se coman animales vivos.

Para unos cuantos de los ganaderos asistentes, esto es un verdadero peligro, ya que supone atraer a los buitres hacia zonas donde hay otros animales vivos. La opinión era que se deberían recoger todos los animales muertos, y llevarlos a una zona (se habló de Campanarios de Azaba) donde los buitres actúen.