El pequeño comercio supone el 16,7% de las empresas de Castilla y León

El 'stock' de empresas operativas en Castilla y León durante el año 2013 fue de 171.171, lo que supone una caída del 1,8% con respecto al año anterior, según los indicadores de demografía empresarial del Instituto Nacional de Estadística publicados por El Norte de Castilla, que revelan que en ese ejercicio el número de empresas que desaparecieron fue superior al de nacimientos en 2.337 unidades. Comparando el dato con el de 2009, el resultado es que seis de cada cien empresas que estaban en activo por entonces en la comunidad autónoma fueron fulminadas por la crisis, un total de 10.632 sociedades.

La tasa de nacimientos de empresas (cociente entre las creadas y el 'stock') se situó en Castilla y León en el 7,2%, frente al 8,6% de media nacional. Por su parte, la tasa de muertes (término con el que el INE se refiere a las empresas que a lo largo del año han disuelto todos sus factores de producción y carecen de vinculación con otras empresas que pudieran comenzar a operar) fue del 8,6% en la región y del 9,3% en el conjunto del país.

Como consecuencia, la tasa de crecimiento neto fue del -0,7% en España y del -1,4% en Castilla y León, que fue la segunda comunidad con una menor tasa de nacimientos, por detrás del País Vasco (5,7%).

El censo regional es de 171.171, el 5% del total nacional, después de que en 2013 murieran 2.337 empresas más de las nacieron

Después de que en 2013 vieran la luz 12.363 empresas y desapareciesen otras 14.700, las 171.171 sociedades de la región que tuvieron actividad empresarial en ese año representaron el 5% del total nacional, que ascendió a 3,41 millones.

El INE destaca que el 55,3% de las empresas españolas operaban en el sector servicios excluido el comercio. A continuación figuran las empresas del sector comercial, con el 24,7% del total, seguidas de las de la construcción (13,6%), mientras que el restante 6,3% operan en el sector industrial.

La mitad en cinco sectores

En Castilla y León y por sectores, la mayor parte de las empresas (28.662) se dedican al comercio al por menor excepto de vehículos a motor y motocicletas; mientras que otras 18.514 tienen como negocio el servicio de comidas y bebidas. De esta manera, pequeños comercios (16,7%) y bares y restaurantes (10,8%) suponen una de cuatro empresas de la comunidad autónoma. En el conjunto de España, las tasas de ambos grupos son menores, del 15,3% y el 8,6%, respectivamente.

El tercer sector, con 16.110 sociedades activas en 2013, es de la construcción de edificios (9,4% en Castilla y León y 7,5% en el conjunto del país);a continuación aparece con 10.942 sociedades el comercio al por mayor e intermediarios de comercio, excepto de vehículos a motor y motocicletas (6,4% en la región y 7% de media nacional); y en quinta posición figuran las actividades de construcción especializada, con 10.900 empresas (6,3%y 5,6%, respectivamente).

Agregados, los cinco sectores concentran prácticamente la mitad (el 49,6%) de las empresas de Castilla y León, frente al 44% del conjunto nacional, que presenta así una mayor diversificación.

De las 171.171 empresas con actividad en 2013 en la comunidad autónoma, el 54,2% eran unipersonales y carecían por completo de empleados;el 37,7% tenían entre uno y cuatro empleados; el 4,9% entre cinco y nuevo y el 3,1% restantes contaban con diez asalariados o más.

Las más resistentes

El informe señala que desde el punto de vista de la evolución del 'stock' de empresas a lo largo de los últimos ocho años, el máximo número de sociedades operativas en España se alcanzó en 2008, con 3,71 millones. Desde ese año, el número de muertes siempre ha sido superior al de nacimientos y en el caso de 2013, desaparecieron 318.807 empresas mientas que se crearon 293.466.

Las actividades económicas con mejor saldo demográfico empresarial en 2013 fueron las administrativas de oficina y otras actividades auxiliares a las empresas, las actividades de bibliotecas, archivos, museos y otras actividades culturales y la publicidad y estudios de mercado. Por el contrario, las que tuvieron peor saldo demográfico empresarial fueron servicios técnicos de arquitectura, ensayos y análisis técnicos, actividades jurídicas y de contabilidad, industria de la madera y del corcho, cestería y espartería y fabricación de muebles.

Aproximadamente el 97% de las empresas que nacieron o murieron en 2013 tenían cuatro o menos asalariados. El 77,6% de las empresas nacidas y el 68,5% de las que desaparecieron no tenían asalariados. El INE destaca también que el primer año de vida es cuando se producen los mayores decesos de unidades empresariales, con tasas de supervivencia del 79,9% o inferiores