La vicepresidenta confirma exenciones fiscales del 1 de noviembre de 2015 al 31 de octubre de 2018 en la reunión de la Comisión Interinstitucional que se encargará de impulsar este aniversario (GALERÍA DE FOTOS)
"El Gobierno considera el VIII Centenario de la Universidad de Salamanca un acontecimiento de excepcional interés público". Así lo ha indicado, la vicepresidenta, ministra de la Presidencia y portavoz del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, que esta mañana ha presidido el acto de constitución de la Comisión Nacional que agrupa a una veintena de personalidades y se encargará de apoyar e impulsar este aniversario. Sáez de Santamaría ha calificado como "proyecto de Estado" este aniversario de una universidad "con un papel preponderante en la enseñanza del español".
Tal y como se esperaba, la vicepresidenta ha avanzado que las exenciones fiscales estarán en marcha desde el 1 de noviembre de este año hasta el 31 de octubre de 2018, con lo que se facilitará la colaboración de patrocinadores del sector privado en este acontecimiento.
El acto se ha desarrollado en el Aula Salinas de las Escuelas Mayores de la Universidad y ha contado con la presencia del ministro de Educación, Ìñigo Méndez de Vigo; el consejero de Educación y la consejera de Cultura de la Junta de Castilla y Léon, el rector de la USAL, la rectora de la UPSA, el alcalde de la ciudad y el presidente de la Diputación.
Sáez de Santamaría recordó que en 2018 se cumplirá el VIII Centenario de la creación de la Universidad y, con ella, del nacimiento de la Universidad en España y de la contribución del Estudio salmantino a la adquisición de un carácter verdaderamente universal. Durante los primeros años del siglo XIII, en 1218, el rey Alfonso IX de León "por consejo saludable, llamó maestros muy sabios en las samptas escrituras y estableció que se fizieren escuelas en Salamanca", arrancando de este modo en la historia la crónica institucional del Estudio salmantino.
Fernando III el Santo ratificaba en 1243 la fundación hecha por su padre y, once años después, en 1254, su hijo Alfonso X el Sabio emitían en Toledo una real cédula por la que se estructuraba de modo definitivo el Estudio, ordenando sus cátedras, sueldos y funciones y fundando la biblioteca universitaria y civil más antigua de Europa. Finalmente, el Papa Alejandro IV concedía a la Universidad de Salamanca en 1255 la condición de Estudio General, al igual que los de París, Bolonia, y Oxford, con derecho para sus graduados a enseñar en todo el orbe cristiano.
La Universidad adquiere por vez primera un carácter verdaderamente universal con la fundación por la corona española de las primeras universidades en el continente americano, que contemplan como su alma mater a la Universidad de Salamanca. El marco estatutario de la Universidad inspira en torno al 80% de estas nuevas universidades americanas, por lo que la Universidad de Salamanca fue la referencia de los estudios universitarios no solo en España, sino también en Latinoamérica.
A lo largo de sus casi 800 años de historia, "la Universidad ha sido un centro de referencia de la ciencia y la cultura en España y en el mundo. Ha acogido en sus aulas, bien como alumnos o como profesores, a personajes fundamentales de las historia de España y universal".
Desde Fray Luis de León, Francisco de Vitoria, Antonio Nebrija, Hernán Cortés, Luis de Góngora o el Conde-Duque de Olivares, pasando por Beatriz Galindo "La Latina" o Lucía de Medrano, la primera mujer profesora universitaria del mundo, hasta Azorín, Miguel de Unamuno, Enrique Tierno Galván, Francisco Tomás y Valiente y Adolfo Suárez, entre otros, por sus aulas han pasado algunas de las mentes más lúcidas de nuestra historia, personajes que han resultado fundamentales y sin los que no podría entenderse la historia de España. Y, a día de hoy, la Universidad de Salamanca continúa su papel como impulsora del talento e incubadora de ideas.
La conmemoración del octavo centenario de la creación de la Universidad ha recibido una decidida y justificada atención por el Gobierno del Estado, que ha convertido esta celebración en un verdadero acontecimiento de estado.