La luz llega a la Iglesia de la mano de Teresa de Jesús

Acostumbrados a oír hablar tanto de esta localidad salmantina por su energía, este domingo una luz especial llegó a Juzbado con la representación de la obra 'Teresa, la jardinera de la luz' a cargo del grupo de teatro Lazarillo de Tormes de la ONCE que concitó en el pueblo un conjunto de sensaciones difíciles de olvidar para todos aquellos que se reunieron en torno a ella.

El pueblo, que celebraba sus fiestas en torno a San Miguel Arcángel, disfrutaba de esa luz especial, cálida todavía, que regala el otoño en sus primeros días en los que se celebra esta fiesta en muchas localidades como broche de un fin verano que ve madurar sus membrillos, se dispone a ver la luz que entraba a raudales por las ventanas de su pequeña, pero acogedora iglesia, iluminando la cara de las hermanas carmelitas de la obra "Teresa, la jardinera de la luz" que constituía en sí mismo un espectáculo inenarrable para cualquiera de los que allí estaban.

El marco, el más apropiado, esto es, la iglesia de la comunidad. Son espacios eclesiales que en muchos casos, como el que nos ocupa, están llenos de las emociones de los que por allí han pasado; son auténticas obras de arte con una acústica maravillosa y desconocida para todo aquel que no sabe de su existencia. Así es como gracias a esa luz cenital que iluminaba de forma especialmente bella al Cristo del altar, a su vez para que todos los vecinos de Juzbado se sintieran orgullosos del mejor marco para representación tan bella.

De nuevo la andariega santa, cautivó con su arrolladora personalidad, defendida por las hermanas carmelitas ante el inquisidor en un despliegue de historia, poesía vida y espiritualidad.

Y es que poco se puede decir ya de una puesta en escena tan bien acogida en estos meses teresianos, en Juzbado ha podido conmemorar los 45 años del nombramiento de Teresa como doctora de la iglesia por el entonces papa Pablo VI.

Magnífico colofón de la tarde fue, para cualquier observador que se precie, fue contemplar como en el corro de felicitaciones en torno a los actores a la salida de la iglesia, se aglutinaban no solo importantes personas como don Casimiro, su párroco o don Fernando, su alcalde, pertenecientes ambos a conocidos ámbitos de la provincia, sino también los habitantes del pueblo agradecidos a ambos por llevar al pueblo la mencionada obra que acababan de disfrutar.

Son los dos muy queridos por su profunda vocación de servicio a su comunidad en sus aspectos civil y religioso, como también, la propia Teresa de Jesús demostró a lo largo de su existencia.

En esta jornada además celebraban el día de las personas mayores que estuvieron agasajadas por el resto de los convecinos de cualquier edad que se reunieron en torno al evento.

Día de felicitaciones para este municipio que ha sabido de la importancia de la luz que viene de las cosas pequeñas del mundo como un regalo que se hace grande en entrañable y sincero.