Jornada de comunión de evangélicos salmantinos en tierras zamoranas

Aprovechamos este día de fiesta en la ciudad para, por la tarde, acercarnos a la provincia de Zamora, concretamente a Villaescusa, un pequeño y acogedor pueblo de la meseta castellana. Tomamos la carretera que va hacia Fuentesaúco y pasamos por Villares de la reina, San Cristóbal de la cuesta... con ganas de adentrarnos en Negrilla de Palencia, La Vellés, Pedrosillo el ralo, Arcediano, Tardáguila...

Antes de llegar a Fuentesaúco tomamos el desvío hacia Villaescusa y traspasamos por sus estrechas y acogedoras calles. Al final del pueblo nos encontramos con una casa donde hasta hace poco una misión suiza realizaba diversos eventos evangelísticos.

Más adelante se llega al merendero municipal donde cada año, por esta fecha, se reúnen los miembros de las salmantinas iglesias evangélicas del Paseo de la Estación y Calle Volta. Este año se les han unido los miembros de la iglesia Bautista de Santa Marta de Tormes. Como dice el Salmo 133: "¡Mirad cuán bueno y delicioso es que habiten los hermanos juntos en armonía!". Allí, niños, jóvenes y mayores compartieron el día entero gratos momentos de comunión a través de juegos y algún deporte; más tarde degustaron deliciosas viandas y, después de entonar cánticos de alabanzas a Dios, retornaron a sus hogares para descansar y volver al día siguiente a sus actividades cotidianas.

Desde la colina donde se encuentra el merendero de Villaescusa, se pueden divisar los amarillos campos castellanos, de una belleza espectacular cuando se visten con los colores del verano. ¡Qué ancha y qué hermosa es Castilla! Aconsejo conocerla antes de salir de sus fronteras.

Texto y fotos: Jaqueline Alencar