Las provincias que recogieron un mayor número de toneladas fueron Valladolid, Burgos y León
Uno de los conceptos que aparecen en las facturas de los talleres mecánicos cuando un conductor va a cambiar el aceite de su vehículo es 'aportación a Sigaus', que supone un importe de 0,06 euros por litro de aceite sustituido. Este concepto hace referencia a la cuota obligatoriapara que el Sistema Integrado de Gestión de Aceites Industriales (Sigaus) recoga y trate el producto.
El aceite industrial es uno de los residuos más contaminantes que existen por su alto contenido en metales pesados y por su baja biodegradabilidad. Es un producto perjudicial tanto para el medio ambiente como para los seres vivos.
Antes del año 2007, no existía ninguna exigencia con respecto a su eliminación, así que algunas personas vertían este producto en los terrenos, en ríos o simplemente los combustionaban. Por ello se aprobó el Real Decreto 679/2006, que prevé que los Sistemas Integrados de Gestión (SIG) se encarguen se tratar los residuos.
Sigaus nació en el año 2007 gracias a este decreto. Su objetivo principal es recoger el aceite usado para su posterior tratamiento y aprovechamiento. Las empresas adheridas a este sistema representan el 90% de las entidades dedicadas a fabricar y distribuir aceites industriales en el entorno nacional. Desde la organización declaran que su meta es «gestionar y financiar la recogida y el tratamiento del residuo generado por los productos que previamente han puesto en el mercado sus empresas adheridas».
El pasado año, en Castilla y León se recogieron 10.244 toneladas de aceite industrial usado, según los datos aportados por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente. Sigaus se hizo cargo de más del 96% de ellas, un total de 9.849 toneladas que se destinaron a crear nuevos productos a partir del aceite que ya no puede seguir utilizándose porque se ha contaminado con residuos como agua, sedimentos, aditivos, metales pesados? Este dato ha mejorado con respecto a 2013, ya que hace dos años en la comunidad se recogieron 1.499 toneladas menos. Aunque estas cifras están muy lejos de las más de 15.000 toneladas que se regeneraron en 2008, cuando la comunidad casi dobla la media española.
Castilla y León es la sexta comunidad autónoma en la que más aceite industrial se recoge y se trata, por detrás de Cataluña, Andalucía, la Comunidad Valenciana, la Comunidad de Madrid y el País Vasco, en ese orden. Por otra parte, los castellanoleoneses son los quintos a nivel nacional en cuanto a la cantidad de aceite industrial comercializada, con 23.845 toneladas del producto puestas en el mercado. Un 56% del aceite procede del sector de la automoción, mientras que el 44% restante procede de la industria.
Según un informe de la Junta de Castilla y León, el coeficiente de generación de aceite usado en la comunidad es del 43%, esto quiere decir que el 43% del aceite industrial puesto en el mercado procede de lubricantes usados recogidos en las distintas provincias de la comunidad. Este porcentaje ha incrementado un 3,7% con respecto a los datos de 2013, pese a que a nivel nacional estos datos descendieron en un 1,91% en 2014. Es conveniente tener en cuenta que la cantidad de aceite comercializado también aumentó un 6,5% en la comunidad. Además prácticamente el 100% del producto recogido en 2014 era potencialmente regenerable.
Todo el aceite industrial que Sigaus trató en Castilla y León el pasado año procede de 5.164 puntos de recogida, de los que el 41% son talleres mecánicos (2.106 talleres), repartidos en 880 municipios y se llevaron a cabo más de 10.000 operaciones de recogida. El 67% de estos puntos de recogida se encuentran en 16 municipios y corresponden a grandes focos de población, en los que sus habitantes generaron más de 100 toneladas de aceite usado a lo largo del año. Mientras que el 26% del aceite procedió de 820 pequeños núcleos rurales (con menos de 100 habitantes por kilómetro cuadrado). Además, en los municipios rurales de menos de 5.000 habitantes se recogieron 2.828 toneladas de residuo y, pese a que no es un porcentaje demasiado elevado teniendo en cuenta el total de producto usado recogido en la comunidad, desde Sigaus aseguran que «supone un volumen significativo de residuo con un elevado potencial contaminante».
Fuente: El Norte de Castilla