CANTALPINO | Un paseo a campo abierto y en pleno casco urbano ha permitido observar el bello espectáculo de contemplar la última superluna de 2015
Pese a lo avanzado de la madrugada, los cantalpineses se resistían a recogerse en sus casas. En el quicio de la puerta, en la plaza, por las calles, en los alrededores de la iglesia, a campo abierto, se les ha visto para disfrutar de la última superluna de 2015, gracias a que los cielos se han mantenido despejados, en una noche en la que se han registrado temperaturas altamente veraniegas.
Esta noche del sábado para el domingo ha sido especial y los vecinos de Cantalpino han podido observar como los cielos despejados facilitaban ver la superluna, un fenómeno astronómico que ocurre cuando el satélite está en su punto más cercano a la Tierra, denominado como perigeo (unos 358.253 kilómetros).
A lo largo de la madrugada, la luna se ha visto más brillante con un tamaño mayor, hasta un 16 % más. El pasado 18 de febrero se produjo la primera superluna del 2015, pero a diferencia de la que se aprecia este fin de semana, no se pudo ver en todo su esplendor, pues estaba en fase nueva, lo que hizo que no se considerase una superluna común, sino como una luna negra, que se repitió el 20 de marzo. Precisamente, que no pudiese observarse hizo que muchos expertos rechazasen denominarla como superluna.
Fotografías tomadas a la 1 de la madrugada de este domingo 30 de agosto en Cantalpino