Visto bueno medioambiental al área transfronteriza de uso comercial-industrial

El Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León ha dado el visto bueno medioambiental al proyecto de creación del 'Área transfronteriza uso comercial-industrial', que quiere ejecutar el Ayuntamiento de Fuentes de Oñoro.

Esta nueva Área vendría a ser una solución a la construcción del tramo de autovía que resta de la A-62, de tal forma que la nueva carretera pasaría por el medio de esta Área, que se compondría de 108.290,33 metros cuadrados divididos en tres sectores.

Concretamente, como se puede ver en las imágenes, a un lado de la autovía estarían los sectores 1 (de 49.034 metros cuadrados) y 3 (de 33.613 metros cuadrados), mientras que del otro lado estaría el sector 2 (de 25.528 metros cuadrados).

Esta Área estará situada junto a la última conexión de Fuentes de Oñoro con la A-62, lo que permite un acceso fácil al casco urbano (concretamente se accederá desde la SA-CV-49, cuyo trazado se remodelará para adaptarlo al futuro enlace de la frontera de la A-62 con rotondas de distribución en ambos márgenes de la autovía).

A la hora de realizar construcciones en el Área, el suelo (actualmente de uso ganadero) se deberá emplear para usos industriales, terciarios y de equipamiento, estando prohibido construir viviendas. En este sentido podrán instalarse comercios, talleres, industrias agropecuarias o almacenes, en parcelas que serán de un mínimo de 500 metros cuadrados.

La idea principal del Ayuntamiento de Fuentes de Oñoro es que los negocios de la localidad ?tanto grandes como pequeñas empresas- que actualmente se encuentran entorno a la carretera Nacional-620 se trasladen a ésta área transfronteriza, al estar conectada directamente con la A-62.

Para la Corporación de Fuentes de Oñoro, es necesario "aumentar la oferta disponible de suelo edificable fundamentalmente comercial", añadiendo en la memoria del Proyecto que con esta área se quiere dar respuesta "a la demanda de suelo fundamentalmente comercial e industrial para impulsar el desarrollo de la frontera y con una situación estratégica próxima al casco urbano". Asimismo se indica que este proyecto "puede mejorar el pueblo".

En lo que respecta a la resolución del Servicio Territorial de Medio Ambiente, se considera que el proyecto "no tiene efectos significativos sobre el medio ambiente", aunque se deberán establecer una serie de medidas protectoras y correctoras para hacerlo posible, por ejemplo, el abastecimiento de agua potable, el saneamiento de aguas residuales, y la gestión de residuos.