Javier Iglesias y el resto de concejales que se marchan se despiden definitivamente

A las 21.09 horas de la noche del miércoles Javier Iglesias levantó por última vez la sesión plenaria del Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo tras 20 años como alcalde de la ciudad. Además de para él, también fue la última sesión plenaria ?al menos en Miróbriga- de Marcelino Cordero, Enrique Cencerrado, María José Ramos, Ana María López, Adoración Cañamero, Rosa Esquivel, Pedro Muñoz, Ignacio Hernández, José Manuel Mangas, Víctor Trigo, Arantxa Lerones y José Prieto. Asimismo, también se despide del Ayuntamiento José Aurelio Pérez, quién no estuvo presente en la sesión al encontrarse de vacaciones fuera de Miróbriga.

Tal y como marca la normativa a nivel estatal, la Corporación 2011-2015 se reunió por última vez para aprobar, tres días antes de la constitución de las nuevas Corporaciones, las actas de los últimos plenos celebrados (la del pleno ordinario de abril y la del pleno extraordinario donde se sortearon las mesas electorales).

Aprovechando la sesión, los concejales que se marchan tuvieron la opción de despedirse de sus compañeros, una opción de la que hicieron uso todos menos Arantxa Lerones y José Prieto. El encargado de abrir la ronda de despedidas fue Víctor Trigo, quién calificó los 12 años que ha estado como concejal como una experiencia "muy bonita", que recomienda "a todo el mundo". Según apuntó, ha aprendido "mucho", resaltando que se lleva amigos y que evidentemente le habría gustado formar parte del Equipo de Gobierno. Asimismo dio las gracias a su partido por haberle dado la oportunidad de trabajar por la ciudad.

La misma referencia hizo el que ha sido portavoz del PSOE durante las dos últimas legislaturas, José Manuel Mangas, quién agradeció asimismo a sus compañeros de bancada socialista la "paciencia" que han tenido que él, porque es una persona "tozuda y cabezota". Dirigido ya a todos los integrantes de la Corporación, les dio las gracias por lo "comprensivos" que han sido, sobre todo con los fallos.

José Manuel Mangas recordó que cuando entró en el Salón de Plenos en 2005 expresó que lo hacía "para sumar y no restar, y esa ha sido la máxima que he intentado mantener, con mayor o menor éxito". Según indicó, se marcha "con la sensación del deber cumplido y de haber trabajado por un Ciudad Rodrigo mejor", resaltando que siempre llevará la ciudad en el corazón porque "me ha dado la oportunidad de desarrollar mi labor profesional, y en ella han crecido y se han educado mis hijos".

Ya en la bancada popular, el turno de intervenciones comenzó con Ignacio Hernández, quién expresó que se trataba de "un momento triste porque acaba un ciclo de nuestras vidas; han sido 16 años al frente de una institución al que ha sido un privilegio servir". Ignacio Hernández tuvo palabras especiales para "nuestras familias", ya que al ser concejales, "las familias renuncian a cosas en beneficio de la ciudad".

También dio las gracias al PP, por haber contado con él en 4 ocasiones ("espero haber estado a la altura"), y a los trabajadores del Ayuntamiento, "aunque a veces no hayamos sido capaces de corresponder a su esfuerzo, que es el esfuerzo de todos". El concejal saliente de Ferias pidió perdón tanto a la Corporación como a los ciudadanos por los errores que haya podido cometer: "seguro que ha habido momentos que no me he comportado como debería".

Ignacio Hernández indicó por último que "salgo con ganas de seguir ayudando en lo que se me solicite para que la ciudad siga creciendo como lo ha hecho estos años".

El siguiente en intervenir fue Pedro Muñoz, dándose la curiosidad que en su caso es su segundo adiós, ya que ya se despidió una primera vez del salón de plenos en el año 2011, cuando no fue reelegido concejal en las Elecciones de aquel año. Sin embargo, acabó entrando en 2013, en lugar de Carmen Cambronero.

La despedida de Pedro Muñoz ("parecida a la de hace 4 años" y asegurando que era el final "definitivo") fue la más diferente, basándose en referencias literarias. Como momentos más destacados apuntó que "la aversión a los demás no existe en mí, y si así se ha interpretado, ese odio ha estado escrito sobre hielo". En este sentido, pidió disculpas "si alguna vez he herido vuestros sentimientos".

Asimismo, dio las gracias "a los que han confiado en mí", a sus compañeros de bancada, a los trabajadores del Ayuntamiento ("sin excepción"), a los medios de comunicación, y a la bancada del PSOE, "en la que tengo buenos amigos y compañeros", resaltando que han hecho "un dignísimo ejercicio de democracia y elegancia, y responsabilidad institucional desde mi toma de posesión hace 2 años".

Pedro Muñoz afirmó que ha asumido "el sentido de la responsabilidad durante los 14 años en los que he sido concejal de la ciudad que me ha visto nacer", añadiendo que "la responsabilidad que siento hoy es infinitamente mayor" que cuando "hace 16 años di un paso adelante para trabajar por mejorar las condiciones de vida de mi municipio".

También entró en el salón de plenos hace 16 años Rosa Esquivel, quién dio lectura a unas palabras escritas en los últimos días de su etapa como concejal, un puesto que califica como "gratificante", porque "aquí se puede comprobar la eficacia transformadora en un pueblo".

Rosa Esquivel dio las gracias a los mirobrigenses, a sus compañeros de partido (con mención especial para Javier Iglesias y Marcelino Cordero), a los que la votaron y a los que no, a la familia "por su apoyo y comprensión", y al personal del Ayuntamiento, con menciones destacadas para Tomás y José Antonio Domínguez por la ayuda prestada para desempeñar el cargo, y para Lourdes ?la trabajadora social del Ayuntamiento- por su "gran calidez y profesionalidad humana".

En el aspecto contrario, pidió disculpas a la familia "por el tiempo que les he dejado dedicar", y "a todos los que se hayan sentido ofendidos con mis decisiones" ("espero haber tenido más aciertos que errores"). Rosa Esquivel expresó sus mejores deseos a la próxima Corporación, "porque sus aciertos harán que la ciudad crezca". Por su parte, indicó que "ha sido un placer servir a Ciudad Rodrigo y estos 16 años han hecho que ame más la ciudad".

En la misma línea se expresó Adoración Cañamero, que se va tras menos tiempo: "ha sido un placer trabajar 8 años por y para Ciudad Rodrigo, y lo seguiré haciendo como ciudadana de a pie". Cañamero expresó su gratitud a "toda la Comunidad Municipal", incluyendo miembros de la Corporación y trabajadores del Ayuntamiento.

La que se despide del salón de plenos tras una estancia más breve, sólo una legislatura, ha sido Ana María López, lo que ha hecho que sea una "legislatura difícil" (al haber tenido que ir aprendiendo), pidiendo perdón por los errores. Ana María López dio las gracias a todos "por enseñarme lo que es la política y poder vivirla desde dentro pese a que no haya querido repetir"; a PSOE e IU porque ha tenido en ellos "amigos y apoyo en lo personal"; y a la familia por el apoyo.

Por su parte, María José Ramos dice adiós tras 8 años, considerando que ha sido "un honor trabajar para intentar mejorar la calidad de vida de los vecinos", añadiendo que ha aprendido que la política "no está para hacer daño, sino para ayudar a los demás".

María José Ramos mostró su agradecimiento a los trabajadores del Ayuntamiento, a los miembros de la oposición ("el trato y el respeto han sido perfectos"), a sus compañeros de partido (por la "ayuda y consejos"), y especialmente a Javier Iglesias, quién le dio la oportunidad de "trabajar por servir a la ciudad". Por último, deseó suerte a los concejales que siguen en el salón de plenos.

El antepenúltimo en intervenir fue el portavoz del PP, Enrique Cencerrado, quién se sumó a los agradecimientos de sus compañeros, incidiendo en que "cualquier compañero podría haber sido portavoz en caso de haber seguido". Según apuntó, llegó hace 16 años "para servir, no para servirme, y he servido; luego todo es cuestión de gustos". Enrique Cencerrado fue el único que dejó una puerta abierta al futuro: "hasta luego, o hasta siempre; quién sabe".

A continuación habló el teniente de alcalde Marcelino Cordero, quién también se unió a todos los agradecimientos realizados, en especial a los trabajadores de sus áreas: obras, jardines, cementerio y urbanismo, así como a los de la planta noble, "siempre dispuestos a colaborar y que todo resulte más fácil". Sin todos ellos "sería imposible acertar como hemos acertado la mayoría de las cosas, y por culpa mía también hemos fallado algunas". Es lo que implica "tomar decisiones"; pidiendo perdón a los mirobrigenses "si en algún momento no he sabido estar a la altura de las circunstancias".

Dentro del capítulo de agradecimientos, también los tuvo para su partido, para sus compañeros -"los que están y los que han estado"- por la "comprensión", y a la oposición, asegurando que se lleva "grandes amigos", resaltando que del PSOE "he aprendido lo que hay que hacer; de otras oposiciones he aprendido lo que no debo haber".

El cierre de las intervenciones correspondió al alcalde Javier Iglesias, quién también mostró su agradecimiento a los empleados públicos y a todos los concejales, resaltando que sus ediles se han dejado "el cuerpo y alma, anteponiendo los intereses públicos a los particulares".

Iglesias reflexionó que ha pasado "media vida como alcalde de Ciudad Rodrigo", indicando que ha sido "un tiempo maravilloso, apasionante, difícil, a veces triste, pero siempre emocionante". Desde su punto de vista, "hay que saber dirigir, liderar, progresar, entenderse y recular", porque la política "es entenderse y dialogar", y "el arte de avanzar en la dirección correcta".

Para Iglesias, durante estos años la ciudad ha trabajado "como un solo hombre para solucionar problemas" como la autovía o en materia sanitaria, manifestando su "orgullo de dejar la ciudad mejor que como nos la encontramos". Según indicó el alcalde saliente, "Ciudad Rodrigo es una ciudad apasionante, que merece la pena trabajar por ella", asegurando que "he trabajado enormemente por esta ciudad y no me arrepiento".

Javier Iglesias expresó asimismo que "ha sido un honor ser alcalde de Ciudad Rodrigo durante 20 años". Sobre la próxima Corporación, desea que "los aciertos sean mayores que los errores; lo importante es seguir avanzando, entenderse, y dejar el resquemor y el resentimiento en casa para poder seguir avanzando". Para Iglesias, lo que no es legítimo es "olvidarse de quienes somos y a los que representamos", esperando que el "legado" que dejan "se acreciente en el futuro".

Levantada la sesión a las 21.09 horas, los concejales procedieron a despedirse, deseándose la mejor de las suertes. Como recuerdo de la actual legislatura, los concejales recibieron un bolígrafo de recuerdo.