La comarca guijuelense huele a rosas y tomillo

La festividad de la Octava del Corpus es muy festejada en la comarca de Guijuelo. Los Santos, Montejo y Gallegos de Solmirón conmemoraron esta celebración con sus correspondientes actos religiosos, en los que participaron un gran número de vecinos.

En el municipio de Los Santos, el altar se instaló en el Portalillo. Bajo una alfombra aromatizada con pétalos de rosa y tomillo, los padres colocaron a los más pequeños para que recibieran la bendición del Santísimo. Este año la bendición recayó sobre dos niños y tres niñas, todos ellos nacidos a lo largo del último año.

Por otro lado, en Montejo, hombres y mujeres participaron en la santa misa y posterior procesión del Corpus por las calles de esta localidad. El acto finalizó con la tradicional bendición.

Los vecinos de Gallegos de Solmirón también honraron al Santísimo, y este año, también fue muy especial para Elena Nieto y su familia, ya que tomó la Primera Comunión. Tras recibir esta Sacramento, los feligreses llevaron a cabo la tradicional procesión del Corpus por las calles del pueblo, recibiendo la bendición los distintos altares que se instalaron por esta localidad limítrofe con Ávila. Toda una tradición que los lugareños quieren perpetuar hacia las siguientes generaciones.