El sector apícola de COAG volverá a demandar al Ministerio de Agricultura que sea obligatorio detallar el país del origen en el etiquetado
Fuente: elaboración COAG a través de datos Eurostat Comex. |
La miel de baja calidad procedente de China inunda el mercado español. Así lo confirman los últimos datos publicados sobre importaciones de miel. En 2014, casi 7 de cada 10 kilos de miel que entraron en nuestras fronteras provenía del gigante asiático, consolidando la tendencia al alza que se inició en 2007. Desde ese año, las importaciones de miel china se han multiplicando por 5, superando por primera vez las 15.000 toneladas en la campaña pasada.
La importación de esta miel supone, según la COAG, "una competencia desleal para los apicultores españoles, ya que la legislación china permite el uso de productos fitosanitarios y antibióticos prohibidos en la UE, así como una continua presión a la baja sobre los precios de nuestra miel en origen". No hay que olvidar que durante los años 2002, 2003 y 2004 las importaciones de miel china fueron prohibidas en la UE por contener residuos de antibióticos.
Ángel Díaz, responsable del sector apícola de COAG, sostiene que "producir un kilo de miel en la UE, conforme a los requisitos de calidad, seguridad alimentaria y sanidad que exige la normativa comunitaria, tiene un coste que varía entre los 2,29 y 6,5 ?/kg". En 2014, el precio medio de entrada de miel china a España se sitúo en 1,36?/kg., y hay que recordar que España es el primer productor de miel de la Unión Europea y el 14º del mundo, pues cuenta con cerca de 26.000 apicultores y 2,5 millones de colmenas.
Ante esta preocupante situación, durante la reunión del próximo jueves, 14 de mayo, el sector apícola de COAG reiterará al Ministerio de Agricultura que sea obligatorio detallar el país del origen en el etiquetado para garantizar la libertad de elección del consumidor.
COAG lleva años denunciando la falta de transparencia que posibilita la aplicación de la Directiva 2001/110/CE de la Miel en España, ahora modificada por la Directiva 2014/63/UE, ya que permite a los operadores etiquetar mieles de fuera de la UE como "mezcla de mieles UE-no UE" sin concretar los países en los que las mieles fueron recolectadas, o etiquetar como "mezcla de mieles no UE" sin indicar si la miel comercializada proviene de China o de cualquier otro país de fuera de la UE.
Esta norma va en contra de lo establecido en la normativa comunitaria en materia de etiquetado, presentación y publicidad de los productos alimenticios ya que las leyendas admitidas por la Directiva inducen a confusión a los consumidores.