Sábado, 11 de mayo de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
El infartado cerebral que completó la Media Maratón cuenta su historia
X
EN PRIMERA PERSONA

El infartado cerebral que completó la Media Maratón cuenta su historia

Actualizado 26/04/2015
David Rodríguez

José Manuel Galán Martín regresa a las pruebas atléticas tras sufrir hace cuatro años un infarto cerebral

[Img #292320]Entre todos los participantes en la X Media Maratón entre Sancti-Spíritus y Ciudad Rodrigo celebrada en la mañana del domingo hubo uno para el cual la carrera era única y especial: José Manuel Galán Martín, quién regresaba a las pruebas atléticas tras cuatro años alejado de las mismas debido a un infarto cerebral.

Aunque apenas ha entrenado un mes, José Manuel Galán Martín completó la carrera, y además en un buen tiempo, 1h.42'13" (en la imagen superior aparece con el dorsal 363).

Sin embargo, para él la verdadera victoria es haber podido estar en la línea de salida, como él mismo relata en un texto que escribió hace unos días a modo de resumen de lo que le ha tocado vivir. A continuación les ofrecemos este texto íntegro:

AGUANTA, SI FUERA TAN FACIL, CUALQUIERA LO LOGRARIA

Hace unos días, alguien me comento que por qué no contaba mi historia.

Dice que seguramente a alguien le vendría bien saber por lo que he pasado yo, no sé si esto servirá a alguien, pero por si acaso aquí lo dejo.

Para mí, esto es muy difícil, nunca he escrito nada, con lo que seguro que estará mal escrito y con muchos errores, pero no os fijéis en como lo escribo, sino en lo realmente importante que es lo que escribo.

Esto es un resumen resumido de cuatro años de pelear por algo en lo que creo. Con muchísimo esfuerzo y sufrimiento para, pasito a pasito, ir consiguiendo cosas. Aunque la mayoría de las veces eran un pasito para adelante y dos para atrás, bueno también hubo momentos buenos y muy buenos, no os voy a mentir, pero al final aquí está el resultado.

[Img #292321]La vida me ha golpeado, pero no ha logrado quitarme la sonrisa

Puedo decir que: ni soy un superman, ni soy un pobrecito. Me considero una persona normal que ha tenido la suerte de tener en los peores momentos la mejor compañía que se puede pedir.

Si crees que esto le pueda venir bien a alguien, por favor, compártelo, hacerlo no cuesta nada. Espero que a alguien le sea útil.

Esto está muy resumido, si alguien necesita algo más que yo pueda hacer, por favor no dudéis es decírmelo, estar´d encantado de poder ser de ayuda.

Lo único imposible es aquello que no se intenta

Para los que no me conocéis esta es mi historia:

Hace cuatro años, una mañana, mi vida cambió para siempre. Tenía una familia normal. Una mujer a la que siempre he querido, dos hijos de 6 y 8 años y estaba esperando un tercero. Tenía mi casa, un trabajo en el que estaba contento? vamos que se podía decir que en mi vida todo iba bien.

Pero esa mañana, todo se truncó en un momento, sufrí un infarto cerebral. Omito todos los desagradables acontecimientos, porque si no la cosa se alarga demasiado.

Después de casi un mes en el hospital, me dieron el alta. Salí del hospital con una sonda directa al estómago para poder alimentarme e hidratarme ya que no podía tragar ni la saliva y casi 30 kilos menos de peso.

Por aquel entonces apenas podía caminar 200 metros sin tener que sentarme agotado.

Pero lo peor vino en la primera revisión médica, en ella me dijeron que probablemente no volviera a hacer vida normal, que me olvidara de trabajar, que lo más probable es que no pudiera jugar más con mis hijos al futbol, a pillar etc.

En cuanto a lo de tragar que me hiciera a la idea de que podría ser para muchísimo tiempo, incluso para siempre. Ese día mi mujer y yo salimos de la consulta sin decirnos ni una palabra, solo nos miramos, sobraba todo.

Para mí eso no fue lo más duro, no sé qué fue peor, si ver como tus hijos de 8 y 6 años te dan de comer a través de un tubo con una jeringuilla (los médicos nos aconsejaron que normalizáramos en medida de lo posible la situación), porque se preveía larga.

O que nazca tu hijo y no puedas cogerlo porque seguramente se te caiga, para cogerlo tenía que hacer como los niños, me sentaba y me lo ponían en los brazos con mucho cuidado.

Puedo decir con toda seguridad y sin miedo a equivocarme, que ese año llore más que en todo el resto de mi vida. Eso sí a escondidas, no quería joder más todavía a la gente que me rodeaba viéndome llorar.

Esos duros días descubrí que los ángeles de la guarda existen, de hecho, yo tengo al mío viviendo en casa. Os puedo asegurar que sin su ayuda nada de esto lo hubiera conseguido.

Todavía hoy no sé cómo pudo hacerlo, con dos niños pequeños, un bebe y lo que quedaba de mí, encima recién parida. Si el cielo existe, seguro que una calle lleva su nombre, porque se lo ha ganado a pulso.

Seguimos que nos vamos del tema. Antes casi de tener conciencia de lo que había pasado, nos pusimos manos a la obra.

"Si realmente no puedo hacer algo, que sea porque de verdad no puedo, y no porque lo diga alguien". Eso fue lo que me dije.

Con la ayuda de la unidad de disfagia, a la que estaré eternamente agradecido, y muchísimo esfuerzo, a los meses conseguí tragar (por cierto decíos que las agujetas de la lengua son las peores agujetas que he tenido nunca, y siempre he hecho deporte).

Todos los días salía varias veces a caminar, con lo que por esas fechas ya caminaba con bastante soltura y sobre todo a mi pequeño ya podía cogerlo.

Tardé otros tres meses más en poder encadenar tres zancadas seguidas corriendo, y eso que lo intentaba todos los días varias veces. Conseguí antes montar en bici que encadenar tres zancadas corriendo.

Al año y medio, y después de pasar varias veces por el tribunal médico y suplicar que me diesen tiempo antes de tramitar mi incapacidad, me dieron el alta para trabajar. Eso sí, con una serie de limitaciones.

Al poco tiempo conseguí subir escaleras. A los dos años habíamos conseguido casi todo, digo habíamos porque como ya he dicho el mérito no es solo mío, sin mi ángel no lo hubiera logrado.

Aprovecho para expresar mi queja porque en la Seguridad Social no había ninguna rehabilitación para poder mejorar las condiciones en las que me dieron el alta. Salvo la unidad de disfagia a la que estaré eternamente agradecido.

No os voy a mentir, durante todo este tiempo hubo muchísimos momentos malos, incluso a temporadas solo hubo malos, momentos de decir: que le den a todo, no merece la pena tanto esfuerzo, pero gracias a la gente que siempre ha estado a mi vera y sobre todo a mi ángel, que siempre tenía esa palabra, ese gesto, esa sonrisa? eso que siempre te empujaba a tirar para adelante, esto no ocurrió.

En todo este tiempo hemos ido consiguiendo pequeños logros, hasta el punto que hoy día se puede decir que hago una vida normal, puedo hacer casi lo que hace cualquier persona.

Hace poco más de un mes, conseguí todas las bendiciones médicas para empezar a correr de verdad, antes solo trotaba y poco, porque no podía hacer esfuerzos.

Nada más recibir la noticia, me apunte a una media maratón, este domingo me dispongo a correrla.

Soy consciente de que mes y pico para preparar una carrera como esta es muy poco. Sé que físicamente no voy justo, voy lo siguiente. Pero esta carrera, a diferencia de todas las demás carreras la habremos ganado en el momento en el que pise la línea de salida. El resultado después no importa lo más mínimo. Aunque eso sí estoy seguro de poder acabarla, porque kilometro a kilometro me ira empujando toda esa gente que ha estado todo este proceso a mi lado. Y si por un casual me quedo sin fuerzas y no puedo más, sé que ella como ha hecho siempre me tenderá la mano, me mirará con dulzura, sonreirá y dirá: vamos cariño que tú puedes con esto y con mucho mas, después me cogerá de la mano y me llevará hasta el final. Es lo que ha hecho siempre.

Esta carrera es muy importante para mí, es la manera de decir a toda esa gente que no me ha dejado, que ha merecido la pena, que tiene su recompensa.

Es una manera de decir "que se puede". Yo creo que toda recuperación empieza por la cabeza, si uno tiene muy claro que se puede, tiene ya mucho ganado. Con esto no digo que sea fácil, ni mucho menos. Digo que si no se intenta nunca sabremos donde hubiéramos llegado

QUIERO AGRADECER A TODOS Y CADA UNO DE LOS QUE HABEIS PASADO POR MI VIDA EN ESTA EPOCA, PORQUE EN MAYOR O MENOR MEDIDA HABEIS HECHO QUE ESTO SEA POSIBLE.

EN ESPECIAL QUIERO AGRADECER A MI ANGEL DE LA GUARDA TODOS LOS MOMENTOS QUE HEMOS PASADO JUNTOS, CON SUS SUFRIMIENTOS, SUS LAGRIMAS, EN FIN SOLO ELLA SABE POR LO QUE HA PASADO PARA PODER ESTAR AHORA ASI. TE QUIERO

Ya os contaré como acaba la cosa el domingo, aunque eso es lo de menos.

NO ESTOY DICIENDO QUE SEA FACIL, ESTOY DICIENDO QUE VALDRA LA PENA

Comentarios...