El Grupo Magritte insta a una mayor convergencia e integración en la política energética europea

Los CEOs de cuatro grandes eléctricas europeas - GDF SUEZ, Iberdrola, CEZ y GasTerra - se reunieron hoy con representantes de las tres principales instituciones europeas (Parlamento Europeo, Comisión Europea y Consejo de la Unión Europea) para entregar las propuestas del Grupo Magritte sobre el marco renovado de política energética.

La evaluación de la industria de la energía realizada hace dos años por el Grupo Magritte es ampliamente compartida hoy. En particular, la estrategia de la Comisión Europea sobre la Unión Europea de la Energía constituye un importante avance en este sentido. Existe un consenso general en que la industria energética europea debe hacer frente a enormes desafíos que requerirán un mayor liderazgo de política energética.

Actualmente se está dejando un amplio margen para los enfoques nacionales a corto plazo que sólo sirven para profundizar las diferencias entre los mercados. Sin embargo, las empresas hoy en día tienen cada vez mayor escala europea o incluso mundial, más allá de las fronteras nacionales, precisando de reglas claras y equitativas en todos los Estados miembros.

Unir fuerzas ahora nos permite poner en práctica soluciones a nivel europeo para conseguir una eficiente protección climática, seguridad de suministro y precios justos en el mercado de la energía. Para lograr esta renovada política energética y climática, el Grupo Magritte propone las siguientes acciones:

Protección climática eficiente:

• Un acuerdo global de largo alcance en la cumbre internacional sobre el clima de este año en París. Sin embargo, la UE produce tan solo el 11% de las emisiones mundiales de CO₂ - y está previsto esta proporción disminuya aún más en el futuro. Aunque es esencial que Europa asegure un crecimiento sostenible es aún más importante que continúe sus esfuerzos para alcanzar un acuerdo global de largo alcance.
• Es necesario acometer cuanto antes la "reserva de estabilidad del mercado" (MSR) (1) para el mercado de carbono de la UE. El precio del carbono ha llegado a un nivel tan bajo que no incentiva la transición hacia una economía baja en carbono en Europa. Para poner remedio a esta situación es imprescindible poner en marcha la Reserva de Estabilidad del Mercado (MSR) en 2017; incluir los derechos de emisión diferidos y no asignados en dicha reserva y plantear reformas estructurales del Sistema de Intercambio de Emisiones (ETS) a partir de 2017. Además, las políticas y medidas superpuestas deberán ser retiradas gradualmente. Actualmente, el ETS de la Unión Europea no proporciona a los inversores señales que favorezcan las tecnologías bajas en carbono. Los precios del CO₂ son simplemente demasiado bajos y no aumentarán sustancialmente si no se reforma el sistema. Esto no sólo pone en juego nuestras inversiones, sino también nuestra credibilidad y nuestros objetivos acordados para 2030.
• El desarrollo de las energías renovables debe estar basado en el mercado, impulsado por el mercado de CO2 y mecanismos de apoyo competitivos aplicados a nivel europeo.

Seguridad de Suministro:

• En gas: Nuestras prioridades deberían ser la explotación del potencial doméstico de energía así como la diversificación de rutas, almacenamiento y capacidad de GNL que permitan la creación de un mercado interior de la energía más fluido, transparente e interconectado. Las relaciones comerciales con los proveedores de energía deben seguir siendo responsabilidad de la empresa. Contrariamente a las ideas sobre la compra en bloque de gas, los CEOs destacan el valor de las relaciones comerciales establecidas con los proveedores para la seguridad del suministro. Por esa razón, también abogan por garantizar la confidencialidad de la información comercialmente sensible contenida en los contratos de suministro de gas.
• En electricidad: Los enfoques regionales destinados al cumplimiento de un marco unitario, tanto para la participación transfronteriza en los mecanismos de capacidad como para la cooperación entre los operadores del sistema en materia de seguridad del suministro parecen ser una solución prometedora hacia una mayor integración energética de la UE. Será necesario identificar, región por región, los principales obstáculos para la realización del mercado interior de la energía y buscar enfoques armonizados al abordar problemas similares en diferentes países.
• Sobre la base de lo anterior, es crucial proporcionar a los mercados de electricidad señales sostenibles que no siempre podrán ser satisfechas por los mercados de electricidad a corto plazo en su forma actual. Se debería aceptar que un mecanismo de señales a largo plazo esté abierto a la participación transfronteriza como solución viable para proporcionar a los inversores señales de precios a largo plazo a la vez que se reduce el coste de la descarbonización y facilita la seguridad de suministro. Sin embargo, estos mecanismos no deberían distorsionar los mercados mayoristas.

Precios justos en el Mercado de la Energía:

Las facturas de energía deberían ser totalmente transparentes y reflejar los costes en todos los Estado miembros. Los altos precios de comercialización en Europa son el resultado de impuestos y recaudaciones fiscales, y no de los costes de generación de energía o los peajes de la red. El alto nivel actual de impuestos y tasas, que en algunos casos representan más del 50% de los precios finales, está revirtiendo las medidas positivas adoptadas recientemente hacia la integración del mercado y la convergencia de precios entre los Estados miembros.

Grupo Magritte: una iniciativa única en Europa

Desde su lanzamiento en mayo de 2013, el Grupo Magritte viene ofreciendo su evaluación de la situación del mercado de la energía en Europa. Los CEOs de las empresas que componen el grupo, tienen como objetivo contribuir al debate y ofrecer propuestas constructivas.

Hasta ahora, se han producido algunos resultados prometedores, sobre todo en lo que respecta a los regímenes de apoyo a las renovables y el mercado de carbono.