La procesión del Santo Entierro reúne once pasos y a una multitud de turistas

Espectacular Viernes Santo el vivido en Alba de Tormes, donde además de la Semana Santa se notó la masiva afluencia de turistas a las Edades del Hombre. El buen tiempo acompañó durante todo el día permitiendo que los pasos procesionales completarán el recorrido que este año tuvo punto y final en la iglesia de San Pedro. La procesión en la que participaron once pasos.

Entre ellos 'La Dolorosa', una talla policromada del S. XVII, correspondiente a la escuela castellana de Gregorio Fernández. La imagen, también llamada Virgen de las Siete Espadas, representa los siete dolores que la Madre de Dios sufrió por su Hijo: La Presentación en el Templo, La Huida a Egipto, el Niño perdido en el Templo, El Camino del Calvario, la Crucifixión, el Descendimiento y el Entierro.

También entre las más veneradas el Santo Cristo de la Salud, procedente del convento de San Leonardo, extramuros de esta villa, de quienes ha tomado la designación del Santo Cristo de San Jerónimo, siendo trasladada en 1835 a la iglesia parroquial del Apóstol San Pedro. Los dos pasos pertenecientes a la Cofradía de la Cruz y del Amor, San Juan Evangelista y la Virgen de la Esperanza. San Juan, portando cáliz en mano izquierda y mano derecha señalando la cruz que porta banda verde, siendo fiel a los colores de la capa de la Cofradía que saca el paso en procesión. La Virgen de la Esperanza, como no podía ser de otro modo viste capa verde y vestidura blanca, porta entre sus manos una rosa roja y su cabeza es adornada con corona.

Destaca como cada año el Jesús Nazareno, paso procesional del Convento de Santa Isabel acompañado de penitentes con vestimenta, capuchón y capa morados. No faltaron el Ecce Homo, La flagelación del Señor, Jesús ayudado por el Cirineo, la Virgen de las Angustias, el Santo Sepulcro y la Madre de Dios.