Los cofrades de la Vera Cruz llevan en andas a Nuestra Señora de la Soledad

Nuestra Señora de la Soledad, acompañada de los cofrades de la Vera Cruz ha procesionado en la noche del martes santo, arrancando saetas y emocionado recogimiento, a su paso.

La imagen ha sido portada a hombros por 28 costaleros que han levantado sus 500 kilos de peso, durante un largo recorrido, saliendo de la Iglesia de San Juan y pasando por la calle Mayor, un buen tramo de la calle Colón, la Corredera y la Puerta la Villa, hasta llegar de nuevo a su templo.

La imagen de Nuestra Señora, fue adquirida por la cofradía, hace unos diez años, a los imagineros salmantinos Monzón y Cid, que realizaron una talla en madera similar a la de la Soledad de Salamanca.

Se trata de una figura completa en madera, incluidos los ropajes, que también los tiene tallados, pese a que quedan ocultos por el vestido y el manto. Pilar Asunción y María José Álvarez son, este año, las camareras de la Virgen, y las encargadas de vestirla, tarea que les lleva unas tres horas, dada la dificultad de mover una imagen de tamaño natural y considerable peso.

La imagen de la Virgen ha estado precedida, en la procesión, de un crucifijo con historia, pues se trata de El Cristo de la Buena Muerte, la imagen de un crucificado que antiguamente presidía los velatorios de los cofrades de la Vera Cruz, y les acompañaba a su última morada.

Tanto la imagen de la Soledad, como las que saldrán en la noche del Viernes Santo, en la procesión de El Santo Entierro, pertenecen a la cofradía de la Vera Cruz, y entre las que se podrán ver ese día, destaca el paso de El Calvario, realizado en madera de peral por el escultor bejarano González Macías y colocado sobre unas andas hechas con traviesas de las vías del tren.