BÉJAR | Se está procediendo a vallar las entradas para protegerlo de los cacos que se dedican por la noche a robar los cables de las farolas
En los últimos tiempos han tenido lugar varias incursiones nocturnas en el Parque de la Aliseda que han dejado sin luz sus farolas. Los ladrones arrancan los cables y se supone que para vender el cobre que alcanza altos precios en el mercado negro.
Para evitar que sigan produciéndose estos robos, o al menos que no sea tan fácil acceder al material de alumbrado, le Ayuntamiento está procediendo en el día de hoy a vallar las dos entradas del parque, con el fin de ponérselo un poco más difícil a los cacos.
Por el momento se desconoce cuál será el horario de apertura del parque, por el que se atraviesa de una parte a otra de la ciudad, en muchos casos para acceder por la mañana, pronto, a los trabajos o al Centro de Salud, pero se supone que será lo suficientemente amplio como para que el parque siga manteniendo su función de nexo entre el centro de la ciudad y los populosos barrios de Los Praos y la Calle Recreo.