VOTAR EN REBAJAS

Creo que en toda la historia de la democracia en España, es ahora cuando con más fuerza los ciudadanos de a pie estamos reaccionando ante los "entresijos" de la política y de los efectos que causan en nosotros, la primera vez que cualquier español, de cualquier estatus, habla con propiedad y con fuerza, por no decir con ira, de temas políticos, la primera vez que a la piel de gobernantes y opositores le llega el rugido de la democracia.

Hasta hace muy poco, solo hablaban ellos, ahora hablamos todos.

Y ésto ha originado que en el gran mercado de los votos, se hayan implantado las rebajas.

Sacan los políticos su mercancía en descarnada competencia, nos muestran sus ahora abundantes productos con etiquetas llamativas, productos y productos bellamente expuestos, agresivamente colocados en las primeras e

stanterías, casi regalados.

Se acercan las elecciones, y dentro de nada, las puertas de sus almacenes se abrirán de par en par, ante una muchedumbre amontonada que, ahora sí, entrarán corriendo a abalanzarse sobre las promesas expuestas a bajísimos precios.

Bien dice la OCU que en rebajas tengamos cuidado con lo que compramos. Hay que mirar bien la etiqueta, fijarse en la calidad, en el fabricante, en si ese producto existía antes o lo han fabricado para la ocasión.

Pues lo mismo a la hora de votar en rebajas. ¿Son de calidad las promesas? ¿Están hechas para la venta especial masiva? ¿El precio nos va a salir luego caro?

Y sobre todo, hay que tener en cuenta que en estas rebajas no se admite devolución ni cambio...hasta que pasen cuatro años.

Mª del Carmen Prada Alonso