Denuncia que el borrador deja los efectivos muy por debajo de los que se necesitan para cubrir las necesidades en los centros sanitarios
El Sindicato de Enfermería, SATSE, de Castilla y León se concentrará este jueves ante la Consejería de Sanidad en Valladolid para pedir que no disminuya el número de enfermeras en la plantilla orgánica de los centros sanitarios de la Comunidad, ante la celebración de la Mesa Sectorial que abordará este asunto.
SATSE considera que el borrador de la plantilla orgánica que ha elaborado la Consejería deja los efectivos de enfermería muy por debajo de los necesarios para garantizar que se cubren las necesidades asistenciales con que cuenta la Comunidad, "por lo que rechaza la afirmación efectuada desde la citada Consejería sobre que esas plantillas son las adecuadas para atender las necesidades de personal y cubrir la demanda asistencial de la población". Los datos que facilita la Consejería son engañosos porque las 149 plazas de enfermería que asegura que se crean no son nuevas contrataciones sino consolidación de puestos de trabajo que ya existían y que estaban ocupados por profesionales de forma temporal y en algunos casos desde hace más de cinco años, por lo que no se aumentará el número de enfermeras con que cuentan los centros sanitarios, que seguirán con la misma plantilla que la actual y en algunos hospitales con menos dotación de enfermeras.
Además, indica que la Consejería "ha usado como criterio para definir esas plantillas el de los procesos asistenciales que se dan en los centros y no ha tenido en cuenta que la carga asistencial ha ido incrementándose en los últimos años por los recortes y la falta de sustituciones del personal enfermero, que sigue vigente, como tampoco ha contemplado las necesidades asistenciales de cada uno de los centros sanitarios, que difieren de la cifra preestablecida para calcular la plantilla por procesos".
Por tanto, SATSE "rechaza ese borrador porque no supone una mejora para los profesionales de enfermería ni para la cobertura sanitaria en la Comunidad" y manifiesta que es una vuelta más de tuerca en los recortes que ya ha sufrido el colectivo enfermero en la región, sometido ya una profunda precariedad laboral y profesional en numerosos casos que en nada beneficia a la asistencia sanitaria.